El secretario de Justicia, Antonio
Sagardía, se inhibió del caso del asesinato de ocho personas en el
norte de Puerto Rico por haber defendido al principal sospecho de
las muertes, lo que ha desatado la polémica.

El secretario de Justicia dijo el miércoles que se inhibía oficialmente
del caso, tras recibir información de la Fiscalía según la cual el
principal sospechoso del asesinato de 8 personas la noche del pasado
sábado en la localidad de Sabana Seca, en la costa norte, es Alexis
Candelario Santana, a quien defendió en 2003.

Sagardía consiguió con su pericia que su defendido entonces y hoy
sospechoso de ordenar el mayor asesinato colectivo de la historia de
Puerto Rico cumpliera una pena de sólo seis años aun siendo
declarado culpable de cinco asesinatos y condenado a 12 años de
prisión.

El director de la Policía de Bayamón -área dentro de la que se
cometieron los asesinatos-, coronel José Morales, explicó a Efe
sobre el mediático caso que Alexis Candelario Santana es un
delincuente relacionado con el mundo de la droga del que hasta ahora
no se tenía noticia.

Morales detalló que según la información de que dispone, éste,
supuestamente, podría haber ordenado los asesinatos para recuperar
el punto de venta de droga existente en el bar "La Tómbola", donde
se cometió la masacre, y cuyo propietario es un primo del
sospechoso.

El jefe policial dijo que una hipótesis posible es la de que
Alexis Candelario Santana, tras salir de prisión, quisiera recuperar
el control de ese punto de droga, a lo que se opuso su familiar, lo
que desató la represalia del ya famoso delincuente.

Morales aclaró que desconoce la trayectoria criminal previa de
Alexis Candelario Santana y que en cualquier caso no hay todavía
evidencias claras que apunten a la autoría de este delincuente.

Sobre la decisión de Sagardía, una fuente del Departamento de
Justicia señaló a Efe que se trata de una iniciativa preventiva para
evitar posibles polémicas, dado que en un caso de esta magnitud es
normal que el secretario intervenga en colaboración con el fiscal
encargado del proceso.

La fuente aclaró que en 2003 Alexis Candelario Santana fue
efectivamente declarado culpable de cinco asesinatos y condenado a
12 años de reclusión, aunque salió en seis a la calle por diferentes
bonificaciones carcelarias.

Agregó que Sagardía pudo alcanzar entonces ese acuerdo con el
fiscal al existir "pruebas débiles" para la inculpación de Alexis
Candelario Santana.

Sagardía, un reconocido criminalista con casi dos décadas a sus
espaldas como abogado en la isla, subrayó que no puede controlar las
acciones de sus antiguos clientes, después de recordar que el código
ético de su profesión le impide revelar detalles de su ex defendido,
sobre el que la Policía centra sus investigaciones.

"Es inevitable. Estuve en la práctica privada desde 1990 a 2008",
indicó, después de anunciar que ya informó a la fiscal encargada del
caso, Wanda Vázquez, de que no intervendrá en el proceso en marcha.

Sagardía sostuvo que "un abogado cuando defiende a una persona
tiene que hacerlo de acuerdo a sus cánones de ética y dar el
máximo", a la vez que exhortó a los testigos a que "den un paso al
frente" y colaboren con la Policía.

Por su parte, Vázquez pidió a los testigos de la matanza que
cooperen sin temor en la investigación, independientemente de que el
secretario de Justicia haya defendido en el pasado al principal
sospechoso.

La fiscal Vázquez detalló que durante la tarde de ayer fue
informada por fuentes policiales de que Alexis Candelario Santana se
constituyó en el principal sospechoso de los asesinatos, lo que
transmitió a la fiscal general, Ivelisse Domínguez, quien a su vez
contactó con Sagardía.

El propio gobernador, Luis Fortuño, intervino para señalar como
correcta la decisión de Sagardía de alejarse del caso, además de
apuntar que es comprensible que se produzcan este tipo de
situaciones, dados los años del secretario se Justicia en los
tribunales.

La Policía arrestó ayer a varias personas que supuestamente
pueden estar relacionadas con los asesinatos de Sabana Seca, aunque
entre ellas no estaba Alexis Candelario Santana.

La muerte de ocho personas la noche del pasado sábado durante una
fiesta en el bar "La Tómbola" de la localidad de Sabana Seca,
municipio de Toa Baja, es el asesinato colectivo ligado a la
criminalidad más elevado de la historia del país.

El incidente provocó además 20 heridos, algunos de los cuales
permanecen ingresados en estado de gravedad en el hospital Centro
Médico de Río Piedras.