Los hijos de inmigrantes mexicanos en
Estados Unidos sufren una "amplia inequidad" dentro del sistema de
salud estadounidense, según un estudio elaborado conjuntamente pr
los dos países y difundido hoy la Secretaría de Gobernación (Segob,
Interior) de México.

El estudio fue presentado en el marco de la Semana Anual
Binacional de Salud que celebran Estados Unidos y México en la
ciudad de Santa Fe, en el estado de Nuevo México (EE.UU.), durante
el Noveno Foro de Políticas sobre Migración y Salud, destacó la
Segob en un comunicado.

El padre o la madre de uno de cada 15 menores de 18 años en
Estados Unidos, alrededor de 6,3 millones de personas, nació en
México, señala el reporte.

A pesar de que la mayoría de esos menores son ciudadanos
estadounidenses (86 por ciento), "enfrentan obstáculos para adquirir
seguros de salud, principalmente por sus condiciones migratorias y
socioeconómicas", destacó el gobierno mexicano.

Los investigadores concluyeron que más de 1,5 millones de niños
hijos de inmigrantes mexicanos en Estados Unidos no tiene seguro
médico.

En este sentido, los hijos de inmigrantes mexicanos tienen casi
tres veces más probabilidades de no estar asegurados que otros
menores en Estados Unidos.

El documento también remarca que la carencia de una cobertura
médica privada y de acceso a programas públicos de salud constituye
"la principal barrera para recibir atención médica oportuna" para
los descendientes de inmigrantes mexicanos en EE.UU.

A pesar de su situación, los hijos de inmigrantes mexicanos usan
las unidades médicas de urgencias en Estados Unidos con menor
frecuencia que otros grupos de población.

Asimismo, los niños menores de 3 años que son hijos de
inmigrantes mexicanos tienen más altas tasas de obesidad y más
probabilidades de padecer anemia que los hijos de padres blancos de
origen estadounidense, subrayó el ministerio de Interior mexicano.

El acceso a los servicios sanitarios privados es limitado, al
punto que más de la mitad (52 por ciento) de la población de hijos
de inmigrantes dependen de clínicas públicas y centros de salud.

La investigación "acentúa la necesidad de asegurar que los niños
nacidos en Estados Unidos de padres inmigrantes tengan acceso a los
beneficios a los cuales tienen derecho, independientemente de la
condición migratoria de los padres", recalcó el Ejecutivo mexicano.

El informe, titulado "Migración y Salud: Los hijos de migrantes
mexicanos en Estados Unidos", fue realizado por el Consejo Nacional
de Población de México (Conapo), la Iniciativa de Salud de las
Américas, la Escuela de Salud Pública de la Universidad de
California en Berkeley (EE.UU.) y el Centro de Investigación en
Políticas de Salud de la Escuela de Salud Pública.

También colaboraron la Universidad de California en Los Ángeles y
el Centro de Investigación en Migración y Salud (MAHRC, por sus
siglas en inglés), también de Estados Unidos.