El socialcristiano Rafael Ángel Calderón Fournier, de 60 años e hijo del mayor reformador social del país, se convirtió hoy en el primer ex presidente en la historia de Costa Rica en ser condenado a prisión por desvío de fondos públicos de una de las entidades creadas por su padre.

Un tribunal de San José lo condenó a cinco años de cárcel por dos delitos de peculado (desvío de fondos públicos), por un reparto de 8 millones de dólares en comisiones de un préstamo de 39,5 millones de dólares otorgado por Finlandia a la Caja Costarricense del Seguro Social (CCSS) para la compra de equipo médico.

El juicio, calificado como de "trámite complejo", se inició en noviembre de 2008, cuatro años después de que estallara el escándalo en la prensa; concluyó en septiembre de 2009 y la lectura de la sentencia se efectuó hoy, luego de un debate en el que participaron casi 200 testigos.

De esta forma, Calderón, presidente entre 1990 y 1994, ve frustradas sus aspiraciones a la reelección en los comicios de febrero próximo y deja en jaque el futuro político de su partido, la Unidad Social Cristiana (PUSC), que en los últimos años ha venido cayendo en picada en apoyo popular, según encuestas.

Fundador, en 1983, y líder histórico del PUSC, Calderón, abogado de profesión, ha movido los hilos de esta agrupación desde sus inicios como una suerte de continuación del movimiento llamado "Calderonismo", liderado por su padre en la década de 1940.

Calderón Fournier, casado y con cuatro hijos, nació en Diriamba, Nicaragua, el 14 de marzo de 1949, donde su padre, Rafael Ángel Calderón Guardia, presidente de Costa Rica entre 1940 y 1944, residía como exiliado político luego de la guerra civil de 1948.

Calderón Guardia es considerado el "arquitecto" de trascendentales reformas sociales en Costa Rica y, paradójicamente, es el fundador de la CCSS, una de las instituciones más importantes del país y que estuvo en el ojo del huracán por este caso en el que hoy ha sido condenado su hijo.

Aunque nació en Nicaragua, Calderón Forunier fue inscrito como ciudadano costarricense y en 1958 la familia regresó a San José con la autorización del entonces presidente Mario Echandi.

Fue diputado de la Asamblea Legislativa (1974-78) y canciller de Costa Rica entre 1978 y 1980.

Con la trayectoria de su padre como principal arma, Calderón fue aspirante a la presidencia en 1982 y 1986 por el PUSC, pero en ambas elecciones fue derrotado.

En 1990, en su tercer intento, resultó elegido presidente a los 41 años, convirtiéndose en el gobernante más joven en la historia del país.

En su gobierno impulsó una política liberal en lo económico, aunque también defendió la necesidad de llevar a cabo medidas de carácter social, y el país experimentó un crecimiento económico del 7%, con una tasa de desempleo del 5% y una pobreza del 17%.

Luego fue candidato para la secretaría general de la Organización de Estados Americanos (OEA) en 1999, pero retiró su candidatura por falta de respaldo.

A partir de allí siguió liderando al PUSC y se dedicó a sus actividades privadas, hasta que en 2004 estalló el escándalo de corrupción en la prensa.

Calderón fue señalado como una de las personas que había recibido comisiones en mayo de 2003 y enero de 2004 del préstamo de Finlandia a la CCSS, aunque siempre se defendió diciendo que fueron pagos lícitos por una "asesoría".

El 21 de octubre de 2004 fue detenido y al día siguiente una jueza dictó 9 meses de prisión preventiva, pena que le fue levantada el 23 de marzo de 2005, tras pagar una fianza de 427.000 dólares.

Desde entonces, permaneció bajo arresto domiciliario en su casa de San José, situación que se prorrogó hasta el 19 de octubre de 2005, cuando esta medida fue suspendida y sólo se le prohibió acercarse a testigos o abandonar el país.

Con este revés judicial, Calderón anunció que abandona sus aspiraciones a la reelección para las elecciones de febrero próximo, aunque apelará la sentencia y acudirá hasta las últimas instancias, incluida la Corte Interamericana de Derechos Humanos.