Seis hombres y dos mujeres, la mayoría
jóvenes, fueron asesinados a tiros la madrugada del domingo en la ciudad
de Navolato, en el estado de Sinaloa, considerado la cuna de los
principales capos mexicanos del narcotráfico, informó una fuente
oficial.

Los jóvenes estaban conversando en el bulevar Las Palmas cuando
fueron atacados por cuatro hombres que emplearon fusiles de asalto
AK-47, las armas preferidas por los sicarios del crimen organizado,
informó a la prensa el subprocurador regional Zona Centro, José Luis
Leyva Rochín.

El funcionario dijo que los jóvenes estaban bebiendo en compañía
de otras personas y de una banda de música cuando bajaron de un
camioneta los hombres, que abrieron fuego contra ellos y mataron a
ocho e hirieron a tres más.

Dos de las víctimas, los hermanos Cirilo y Óscar Manuel López
Obeso, de 37 y 33 años, respectivamente, tenían antecedentes penales
de robo de automóviles, dijo Leyva, quien aclaró que aún se
desconoce el motivo de la agresión.

Las mujeres asesinadas fueron identificadas como Marisol Moreno
Verástica, de 25 años, y Dalia Azucena Rocha, de 18 años.

Además murieron Jordan Erick González Ramos, de 15 años; José
María López López, de 16; Raúl Geovany Parra Cruz, de 23, y
Rigoberto Niebla Benítez, de 19 años.

En el lugar de los hechos los peritos levantaron 95 casquillos de
bala para fusiles AK-47, y en una carretera cercana la Policía
encontró abandonada una camioneta con impactos de bala y manchas de
sangre, dijo el funcionario.

Sinaloa es considerado el centro de operaciones del capo del
narcotráfico Joaquín "El Chapo" Guzmán, pero también es territorio
donde se mueven los hermanos Beltrán Leyva, acérrimos rivales del
primero, del que en años anteriores fueron socios pero que ahora le
disputan a tiros el control de varias zonas del país.

En otro hecho, en el municipio de China, en el estado de Nuevo
León (fronterizo con EE.UU.), presuntos sicarios del grupo "Los
Zetas", brazo armado de cártel del Golfo, vestidos con uniformes
militares atacaron el domingo a tiros a una familia que viajaba en un
automóvil.

Dos mujeres murieron y otras seis personas resultaron heridas,
entre ellas dos menores.

El Ejército logró la captura de dos de los presuntos atacantes,
quienes confesaron que abrieron fuego porque creyeron que en el
vehículo viajaban miembros de una banda rival.

La violencia en México atribuida al crimen organizado se ha
cobrado 4.682 vidas en lo que va de año, según un reporte del diario
El Universal. En 2008 la cifra llegó a los 6.000 muertos.