Un Gran Jurado del condado San Joaquín, al norte de California, acusó el lunes formalmente a Melissa Huckaby del secuestro, violación y asesinato de la niña hispana de 8 años Sandra Cantú.

Previamente, Huckaby se había declarado no culpable de la muerte de la menor ocurrida en Tracy.

La acusada -hija de un predicador y maestra de Biblia los domingos- lloró al escuchar la lectura de la acusación hecha por parte de la juez Linda Lofthus, por el asesinato de Cantú, quien desapareció el 27 de marzo pasado de su vecindario de casas móviles.

Los cargos de asesinato contra Huckaby tiene los agravantes de secuestro, actos lascivos contra un menor y violación.

La niña fue encontrada dentro de una maleta -perteneciente a Huckaby- en una laguna de riego el pasado 6 de abril.

La maestra de Biblia fue igualmente acusada de suministrar sustancias peligrosas a un hombre y poner en riesgo a una menor.

Estos cargos se refieren a otros casos que las autoridades investigan y en los que se acusa a Huckaby de drogar a un hombre de Hayward y a otra menor de Tracy, pero que no están relacionados con la muerte de Cantú.

La fiscalía no ha determinado si pedirá la pena de muerte para la acusada y el caso se encuentra bajo una orden de silencio emitida por la juez. La próxima presentación de Huckaby ante la corte se fijó para el próximo 10 de septiembre.

Huckaby se encuentra recluida sin derecho a fianza en la cárcel del condado de San Joaquín.