La cancillería hondureña descalificó el jueves a los países de la Alianza Bolivariana para las Américas (ALBA) para que integren la misión de la Organización de Estados Americanos (OEA) que visitará Honduras próximamente.

Los miembros de la ALBA “están descalificados para ser parte de una misión de observación en Honduras”, dijo la vicecanciller hondureña, Martha Alvarado, aunque aclaró que todavía desconocen “la lista” de quienes formarán la  delegación.

Argumentó que “parte del problema” que atraviesa Honduras tras el derrocamiento del presidente Manuel Zelaya “son los países del ALBA”, creado por iniciativa del presidente venezolano, Hugo Chávez, e integrado, entre otros, por Cuba, Nicaragua, Bolivia y Ecuador.

Zelaya adhirió a Honduras a la ALBA el 25 de agosto de 2008.

“El señor Chávez ha tomado posturas abiertas en contra de nuestro país, incluso amenazas de injerencia bélica, insultando a nuestras Fuerzas Armadas”, declaró la vicecanciller a radio América de Tegucigalpa.

El Gobierno de Roberto Micheletti, designado por el Parlamento como presidente el 28 de junio tras el derrocamiento de Zelaya, rompió relaciones con Caracas en julio y ordenó la expulsión de sus diplomáticos, aunque éstos siguen en Tegucigalpa.

Micheletti acusa a Chávez de injerencia, amenazas y de apoyar el proyecto del depuesto presidente de promover una Asamblea Constituyente mediante una consulta que iba a celebrarse el 28 de junio y que fue la causa de su defenestración.

“Todo el que quiera venir a Honduras, lo hemos dicho desde el primer día, está más que bienvenido”, subrayó Alvarado a pesar de su descalificación a los países de la ALBA.

También comentó que le “encanta” la posibilidad de que uno de los miembros de la misión sea el canciller de Costa Rica, Bruno Stagno, cuyo presidente, Oscar Arias, es mediador en el conflicto.

La vicecanciller hizo sus declaraciones después de que el ministro de la Presidencia, Rafael Pineda, dijera a la prensa que el Gobierno de Micheletti está abierto a recibir a la misión de la OEA y que espera que sea “imparcial” ante la crisis hondureña.

La OEA enviará “lo antes posible” la misión a Honduras para tratar de persuadir a Micheletti a aceptar el Acuerdo de San José, propuesto por Arias, aunque aún no ha sido constituida, dijo el miércoles en Washington el secretario general del organismo, José Miguel Insulza.

Entre otros puntos, la propuesta de Arias incluye la restitución condicionada de Zelaya en la Presidencia, que Micheletti rechaza.

Zelaya pide más presión                     de Estados Unidos

El presidente depuesto, Manuel Zelaya, acusó el miércoles al mandatario costarricense, Óscar Arias, de ser “suave” en su mediación con los golpistas hondureños, y puso prácticamente en manos del Gobierno de Estados Unidos la vuelta a la normalidad democrática en su país.

Zelaya realizó esta semana una visita a México, en atención a una invitación que le hizo el mandatario mexicano, Felipe Calderón, como parte de su campaña internacional para exigir la restitución en el cargo, y aseguró que se le está “acabando la paciencia”.

“Independiente de la buena fe de Óscar Arias, que se ganó el Premio Nobel de la Paz, creo que ha tratado con mano suave y mano blanca a los golpistas, y que ya llegó el momento en que empiece a apretar”, señaló.

Y precisamente los presidentes de Estados Unidos, Barack Obama, y de México, Felipe Calderón, y el primer ministro de Canadá, Stephen Harper, abordarán el conflicto en Honduras durante la cumbre de líderes de América del Norte que se celebrará en la ciudad mexicana de Guadalajara el domingo y el lunes próximos.

“El tema de Honduras será analizado con detenimiento” en esa cita, indicó el jueves la secretaria de Relaciones Exteriores mexicana, Patricia Espinosa, al ofrecer detalles sobre la reunión.

Espinosa recordó que “los tres Gobiernos han coincidido en rechazar el golpe de Estado ocurrido en ese país”.

Además, “respaldan firmemente el Acuerdo de San José, propuesto por el presidente (de Costa Rica) Oscar Arias, como la base para avanzar hacia una solución duradera del problema y para restaurar el orden democrático en Honduras”, agregó.