Más de 120 inmigrantes indocumentados, la mayoría ecuatorianos, fueron despojados de casi $1 millón de dólares en total  bajo falsas promesas de tarjetas de residencia hechas por Gregorio González, de 56 años, y Gerardo Bello, de 21,  ambos párrocos de la Iglesia Pentecostal en Corona, Queens, NY.

Uno de los afectados, Henry León, de  26 años, trabajador de una estación de combustible en Peekskill, NY, dijo que viajó con su esposa hasta Corona para reunirse con los dos pastores y que González les dijo  que todo lo que tenían que hacer era llenar un documento y pagarle $8.000 dólares cada uno. 

Según León, los pastores tenían una vía segura para obtener tarjetas de residencia ya que el gobierno les había asignado una cantidad de estas por ser una iglesia.

A León, un fiel católico, todavía le cuesta trabajo creer que un religioso lo haya estafado. “Para ser alguien que habla mucho sobre Dios (…) ¿Por qué tuvo que mentirle a la gente así?” .

Este tipo de casos no es único, en abril un ex ministro de una iglesia en Forest Hills, Queens, y otros cuatro fueron enjuiciados por estafar más de $9 millones a inversionistas, la mayoría de ellos ancianos y miembros de la iglesia. 

Las autoridades dijeron que González y Bello establecieron La Iglesia Roca de la Salvación Eterna en el sótano de una casa en Corona el año pasado y que no estaba claro qué tan grande era su congregación, pero que ninguno de los dos era pastor.

González es un inmigrante ecuatoriano indocumentado que aguarda posible deportación.  Él y Bello enfrentan cargos por hurto mayor, fraude y posesión de propiedad robada.

Así reportó The New York Times