“Yo no tengo la labia que usan los políticos profesionales para convencer a los electores a que voten a su favor, pero sí conozco las necesidades de la comunidad”, dijo Jessica Távara, de origen peruano y quien busca ser la primera concejal latina en Lebanon (PA).

“Decidí correr para ese puesto porque me parece injusto que a pesar de que el 48 por ciento de los estudiantes del Distrito Escolar son latinos, no hay líderes que los representen”, dijo.

Desde hace 14 años que Távara vive en la ciudad y durante ese tiempo se ha involucrado como voluntaria en las tareas de la comunidad.

Elegida como una de los candidatos demócratas para concejal, su siguiente paso es recaudar fondos para sostener su campaña política de los futuros cinco meses, hasta llegar a la elección general del 2 de noviembre.

“Quiero ser la voz latina que sirva de unión entre la comunidad. Hay proyectos de los que no somos parte aún cuando nos concierne. Por ejemplo, hay planes de construcción de un puente porque cuando pasa el tren, se paraliza la ciudad”.

“Otro proyecto que existe es la revitalización de la calle Maple, donde hay que renovar los vecindarios, las casas y los negocios para que haya igualdad en el progreso”.

“Una de las necesidades más urgentes por el momento es la de crear espacios y servicios para los jóvenes latinos; al término del día escolar no tienen qué hacer porque no hay centro que los eduque y entretenga”.

Cuando toca puertas para pedir por los votos de los residentes, Távara dice que la respuesta ha sido positiva e inesperada.

Ella sirve de intermediaria entre quienes que residen en casas  de ancianos y los servicios legales de MidPenn  para abogar por mejores servicios y asegurarse que los derechos de los residentes sean respetados.

“Mi trabajo me permite tomar decisiones que resulten en acciones positivas para los ancianitos, pero a la vez tengo que saber negociar con los proveedores de servicios para lograr un resultado satisfactorio para todas las partes involucradas”.

“Por eso creo que puedo representar a todos los residentes con diferentes posiciones políticas y luchar por una solución común”, dijo.

A pesar de confesar que uno de sus grandes retos es la inexperiencia política, dijo “poseer seguridad y optimismo para empezar y terminar las tareas que me propongo”.

“Si hemos luchado por años para tener nuestro propio centro hispano en Lebanon y ahora estamos dando pasitos de bebés porque ya estamos recibiendo más ayuda para lograr la creación de uno, con su propio edificio para las actividades de nuestra comunidad. Eso demuestra que no me doy por vencida tan fácilmente”.

Y es que por el momento comparten un espacio en las instalaciones de una iglesia, pero no hay suficiente lugar para ampliar los programas.

Ahora empieza la verdadera contienda electoral y para ello, la latina confesó que “conseguir donaciones para mi campaña será todo un reto, pero organizaré eventos con comidas y bailes”.

Mientras trabaja para ganar las elecciones, dedica la mayor parte de su tiempo como madre soltera de tres hijos: Valerie, Julian y  Jenny Jordan.

“Ellos son la fuerza motora que me permite seguir adelante y por los que deseo que la comunidad latina tenga más presencia en las decisiones de la ciudad”, finalizó la peruana.