Los inmigrantes que viven
en Trenton podrán obtener una Tarjeta de Identificación Comunitaria,
a partir de la próxima semana, que les permitirá el acceso a
servicios básicos locales de salud, atención de emergencias,
trámites en oficinas locales y la escuela, entre otros beneficios.

El documento con fotografía podrá ser utilizado para obtener
tarjetas de biblioteca, entrar en los parques del área, y será
extendido tanto a personas adultas como a niños.

"Es un esfuerzo que hemos logrado con el fin de que los
inmigrantes que no tienen documentos emitidos aquí en el país
cuenten con una identificación y no tengan temor a realizar una vida
regular", dijo a Efe, María Charo Juega, directora ejecutiva del
Fondo Latinoamericano de Educación y Defensa Legal (LALDEF), que
forma parte de la Coalición Tremendo Trenton.

La identificación será emitida por las organizaciones que forman
parte de la Coalición y cuenta con el apoyo del Departamento de
Policía de Trenton, el Sheriff del condado de Mercer y la Fiscalía
de este condado.

Es un proyecto que fortalecerá los lazos entre los residentes de
Trenton y permitirá que las personas tradicionalmente excluidas
adquieran un documento fácil de obtener que les conceda un
reconocimiento simbólico como miembros de la comunidad, dijo Juega.

Durante la campaña para lograr la aceptación del documento, las
autoridades han aceptado el protocolo de seguridad de la Coalición,
para verificar los datos y domicilio de quienes soliciten la
identificación.

"No es sólo para inmigrantes sino para la comunidad en general,
porque hay muchas otras personas ciudadanas que por alguna razón
tienen dificultades para tramitar un ID con foto, ya sea por la
distancia, falta de tiempo, incapacidad física, no cuenten con
movilidad, o que no puedan acceder al documento como parte de una
pena por probatoria", dijo la activista.

Trenton, la capital del estado, cuenta con una población de
83,923 personas, de las cuales el 21.5 por ciento son de origen
hispano, según los últimos datos de la Oficina Nacional del Censo.

La tarjeta que deberá ser patrocinada por una organización
comunitaria, incluye información con datos demográficos, datos sobre
la salud del portador del documento y contactos de esta persona,
para casos de emergencia.

Tendrá un costo de 10 dólares, será de utilidad tanto para el
beneficiario como para las autoridades, y facilitará la
identificación de víctimas de crimen o accidentes.

Si bien los directivos de las agencias comunitarias aseguran que
serán flexibles, cuentan con un sistema cuidadoso para probar
quiénes son los solicitantes de la tarjeta de identificación.

Las personas que no cuenten con ninguna forma de documentación
podrán acudir a su organización de ayuda comunitaria más cercana,
que luego de verificar sus datos personales y lugar de domicilio
podrá extender una carta indicando que conoce al solicitante.

El protocolo formal para confirmar la identidad del portador
considerará la combinación de documentos de identidad como
pasaporte, certificado de nacimiento, matrícula consular, recibos de
energía y teléfono.

El beneficio se extiende a la policía, bomberos y personal de los
servicios de emergencia, al tener mayor facilidad de obtener
información necesaria sobre cualquier persona que necesite ayuda.

Un proyecto similar se viene realizando en Ashbury Park y en East
Windsor, en donde la Oficina Hispana y la Iglesia colaboran en forma
conjunta para su expedición.

Y se prevé que otras ciudades pasarán a aceptar la emisión de la
tarjeta.