El gobernador de Nuevo México,
Bill Richardson se unió el jueves a la petición de otros mandatarios
fronterizos para solicitar al Gobierno Federal más fondos y la
presencia de la Guardia Nacional en la zona.

En una carta enviada a líderes en el Congreso, Richardson les
urgió otorgar los suficientes fondos para el programa Anti-Drogas de
la Guardia Nacional en el presupuesto del Departamento de Defensa
para el año fiscal 2010.

De esta manera se incrementaría el presupuesto del estado de
Nuevo México por cinco millones de dólares y enviaría 100 soldados
adicionales de la Guardia Nacional a esta región.

"El apoyo de nuestra Guardia Nacional a las autoridades federales
a lo largo de la frontera es crucial para sacar a la luz el tráfico
de drogas y de armas", dijo Richardson en un comunicado de prensa.

"A medida que la violencia asociada con el tráfico de drogas y de
armas confina intensificándose, es claro que necesitamos apoyo
adicional", enfatizó.

El año pasado, el personal de la Guardia Nacional en Nuevo México
asistió en la confiscación de más de 24.000 libras de marihuana, así
como la incautación de 150 armas de fuego, 69 vehículos y 740.000
dólares de dinero en efectivo.

El gobernador demócrata enfatizó que además de ayudar en la
revisión de autos detenidos por autoridades federales a lo largo de
la frontera, los 109 soldados de la Guardia Nacional que actualmente
se encuentran en este estado llevan a cabo operaciones de vigilancia
con tres helicópteros, vigilan las imágenes de cámaras de vídeo en
áreas remotas y cercanas a los retenes establecidos por la Patrulla
Fronteriza y el Departamento de Aduanas.

El pasado lunes, la Gobernadora de Arizona, Jan Brewer reiteró su
petición de enviar 250 soldados adicionales de la Guardia Nacional a
la frontera con México, ante miembros del comité de Asuntos
Gubernamentales de Seguridad Nacional del Senado de EEUU.