WASHINGTON, D.C. – Dirigentes políticos y de organizaciones latinos y judíos aquí colaboran con una agenda que indican aprovecha la fuerza de cada grupo y responde a los retos que encara la sociedad en general.

    La mayoría representa a grupos nacionales importantes, y los aliados van forjando su colaboración con base en las experiencias que comparten, y sus intereses e ideales.

    Durante su más reciente sesión participaron más de 60 activistas, con una cena estilo buffet y una vertiente de conversación de dos horas que mezcló recuerdos con admiración cultural mutua y propuestas para acciones futuras de colaboración. El evento se llevó a cabo cerca del Capitolio en el Salón del Comité de Relaciones Extranjeras del Edificio Rayburn de la Cámara de Representantes.

    El que marcó el tono fue Tom Kahn, presidente del Latino and Latin American Institute del American Jewish Committee (AJC).  Los que moderaron el diálogo que siguió fueron dos miembros demócratas influyentes de la Cámara de Representantes, Eliot Engel de Nueva York, quien dirige el subcomité del Hemisferio Occidental del Comité de la Cámara sobre Asuntos Extranjeros, y Xavier Becerra de California, vice presidente del Caucus Demócrata de la Cámara de Representantes.

    Varios de los presentes eran miembros de un grupo de trabajo latino-judío que incluye a varios de los dirigentes nacionales de aquellas dos comunidades quienes viajaron juntos a Israel hace tres años este mes.

    Al regresar del viaje, los miembros afirmaron el predominio de vínculos históricos, culturales y cada vez más pragmáticos entre los latinos y los judíos.

    Durante la cena del mes pasado, se les recordó que los judíos que huían de los nazi en Alemania encontraron refugio en países latinoamericanos desde Bolivia hasta la República Dominicana y El Salvador.

    Entre las metas que discutieron durante la cena fue una campaña por educar a otros sobre el papel receptivo que jugaron varios países latinoamericanos durante su diáspora.

    Dina Siegel Vann, directora del Latino and Latin American Institute del AJC y quien coordinara la reunión, contó que la estadía en Israel fortaleció la convicción de los participantes que la creciente relación entre las comunidades latina y judía en cuanto a asuntos extranjeros y domésticos contiene gran promesa.

    Ambos grupos se han establecido fuera de sus hogares ancestrales y ambos han sufrido el prejuicio no sólo en los Estados Unidos, sino en todo el mundo, observó Siegel Vann.

    Entre los dirigentes latinos que participaron fueron presidente de la Coalición Nacional Puertorriqueña, Rafael Fantauzzi, director ejecutivo de la Asociación Nacional de Funcionarios Latinos Electos y Nombrados, Arturo Vargas, y presidenta de la Liga de Ciudadanos Latino Americanos Unidos, Rosa Rosales.

    Rosales recordó a los asociados de la herencia inmigrante que comparten. Instó a los miembros judíos a unirse a los hispanos para perseguir legislación justa y compresiva de reforma migratoria.

    La mayoría concordó en que los latinos podrían aprender de los judíos a afirmar mayor influencia sobre la política extranjera estadounidense – en particular en cuanto a América Latina.

    Durante la mañana siguiente los participantes visitaron el Museo del Holocausto dirigidos por sobrevivientes del holocausto.

    Al dar un discurso en el museo, Raúl Yzaguirre, quien fomentó durante tres décadas el Consejo Nacional de La Raza hasta llevarlo a importancia mundial, describió cómo él con frecuencia formaba alianzas con organizaciones judías y otras sobre temas de interés común. Enfatizó la importancia crítica de continuar fortaleciendo estas alianzas.

    “No se puede lograr nada en Washington sin crear coaliciones”, explicó, refiriéndose a que, “La comunidad judía experimentó el mismo tipo de xenofobia que experimentan ahora los latinos. Ellos comprenden nuestras experiencias y nosotros comprendemos las de ellos”.

    Se están programando más reuniones. Los aliados hablan de formular nuevas estrategias y metas para fomentar la participación de los latinos en la política extranjera y aumentar el papel de abogacía de los judíos en cuanto a la reforma migratoria. Conversaron de formar una frente unida para promover una vasta serie de cambios que consideran críticos para volver al pedestal que ocupó los Estados Unidos como el dirigente de mayor confianza y compasión en el mundo.

    (Soraya Schwartz es reportera de Hispanic Link News Service con sede en Washington, D.C. Comuníquese con ella a: [email protected]).

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