El gobierno de la ciudad rompió el pasado 25 de noviembre los candados de los "vagones" y sacó la mercancía que había en el Flea Market de las calles Front y Gurney.

El pasado 27 de septiembre alrededor de 20 comerciantes de ese “pulguero” habían recibido una carta que les instaba a desalojar los locales en donde llevaban vendiendo su mercancía casi por 30 años.

Según Daisy Rivera, quien arrendaba dos “vagones” desde hace 4 años, las autoridades de Licencias e Inspecciones (L&I) acudieron a la zona y pusieron señales de peligro. “Hace un par de días que dejé de vender, L&I nos informó que van a tirar los locales y que teníamos que sacar todo”, dijo Rivera.

Y así fue, la Policía acudió la mañana del martes para sacar lavadoras, colchones, juegos de sala y mercancía que,  a las pocas horas, gente recogió, explicó José Luís Gerena, comerciante puertorriqueño.

Gerena rentó tres locales durante ocho años, era su principal ingreso y ahora se ha quedado desempleado.

“No pudimos hacer más nada, todo lo que tenía me lo lleve a una yarda y ahí lo tengo hasta que podamos encontrar otro lugar”.

 “Hubo una redada en la cual se realizaron 94 arrestos, llevamos varias semanas con una guerra entre dos pandillas de drogas en esa zona”, dijo María Quiñones, concejal del Distrito 7.

“Hemos estado trabajando con la Policía para coordinar servicios en la zona, que incluye la limpieza y asegurar las leyes del código de fuego y de almacenamiento, que obviamente ninguno de esos locales tiene en orden”, precisó Quiñones.

 Según la concejal estos “vagones” representan un peligro de incendio y de salubridad (…). Se le hizo una notificación oficial al dueño para darle tiempo para cumplir y tirar todo eso. No queremos correr con los costos, pero si el dueño no cumple con su deber le vamos a poner una multa”.

El dueño Richard J. Walsh ni L&I contestaron llamadas de AL DÍA.