LIVE STREAMING

"La vida me enseñó cómo sembrar"

MORE IN THIS SECTION

Colombia's Rock Icon

Latinas in Tech Launches

Latinas In Tech Launches

Mayor Parker's Vision

Tragedy in Kansas City

Boriqua Pride

SHARE THIS CONTENT:

TOMASITA ROMERO, de 76 años, le enseña a Ariel Rodríguez cómo sembrar, cocer y recetas típicas de Puerto Rico. David Cruz/AL DÍA

Iris Brown es una puertorriqueña que cuida los jardines en el oeste de Kensington, área antes conocida como "badlands" por el constante tráfico de drogas y violencia de pandillas, pero que ha cambiado gracias a Norris Square Neighborhood Project (NSPN) y su Grupo Motivo de mujeres.

NSPN busca involucrar a la comunidad con la naturaleza, el arte y sus raíces hispanas, ayuda a los jóvenes a encontrar trabajo y ofrece guardería de niños a bajo costo en un programa de verano. También anima a las mujeres a continuar con sus tradiciones y a contribuir en proyectos culturales para la comunidad, como el Grupo Motivo.

Es así como ocho puertorriqueñas de 16 a 76 años se han dado a la tarea de rescatar las costumbres y tradiciones de Puerto Rico e implantarlas en el norte de Filadelfia a través de la horticultura, la jardinería, bailes caribeños y comida típica.

El jardín y la huerta que crearon, en la que siembran yuca tomate, cilantro, espárragos, repollos hierbas, especies y medicinales, entre otras, fueron reconocidas por la Sociedad de Horticultura de Filadelfia y el programa de flores.
En el jardín más grande, Las Parcelas, las mujeres tienen una casita pintada con colores vibrantes al estilo de los años 1940 en Puerto Rico. Esta,"La casa de abuela", será adecuada para convertirla en un museo.

Brown dijo que cuando el cielo está gris, la gente ve los colores del jardín y a muchos les da un sentimiento de nostalgia. "Alguna gente viene a contar sus historias de la vida en Puerto Rico, algunas historias son muy tristes y ha habido lágrimas, pero también alegrías".

"A que tu no tienes una herradura para la buena suerte, un pedazo de pan en la pared" para que nunca falte en la casa, le dicen a Brown aquellos que al ver la casita recuerdan la suya en la isla.

"He aprendido muchas cosas, a hacer jardines, a atender las plantas, cocinar", dijo Ariel Rodríguez, de 16 años y nieta de Brown.

Brown explicó que quieren pasar esas tradiciones y costumbres a las nuevas generaciones. "Mi nieta tiene una responsabilidad bien grande que es aprender, vivir y pasar la cultura porque si no, se muere".

Cuando Brown trabajaba para NSNP participaba cada tres años en Green Country Town, del programa horticultura de la ciudad, que involucraba a jardineros y voluntarios para reforestar un barrio durante tres años y que lograba con ello un cambio en la comunidad, pues la gente se motivaba a limpiar y cuidar el vecindario.

"Yo fui a dos de las celebraciones y pensé, esto es lo necesitamos nosotros acá", exclamó Brown, quien contó con la ayuda de la directora,  la hermana Carol Keck, quien escribió una propuesta diciendo que querían ser el primer latino Green Country Town.

La organización trabajó con la comunidad durante tres años y los fondos se usaron para la tierra, las semillas y grandes árboles.

Tomasita Romero, de 76 años, quien lleva casi 20 años viviendo en la comunidad del oeste de Kensington, recuerda las condiciones del área cuando llegó:
"Aquí antes era bien malo. La gente venía a echar su basura en este lote. Nunca pensamos que de un lote de automóviles con brea se creara en un jardín", dijo.

"Era una pesadilla (…) cuando la droga empezó a bajar un poco, la vecindad quedó muy sucia. Era tierra de nadie porque estaba todo desordenado. Nosotras humildemente empezamos con la pequeña tarea de cambiarlo poco a poco y nos tomó muchos años porque no teníamos los fondos y porque las mujeres tenían que mantener sus hogares", explicó Brown.

"Para estas mujeres, aprender a dejar su hogar para hacer tareas o servicio comunitario no es fácil. Pero poco a poco lo hemos hecho por 18 años", expresó Brown.

Desde niña Romero ha tenido una relación especial con la tierra, aprendió cómo sembrar y cuidar las plantas.

"Cuando crecí en el campo de Puerto Rico, mi padre me enseñó cómo trabajar la tierra y cuando uno tiene ese principio, como que se queda y entonces lo pone uno a trabajar cuando es adulto. Nos encanta que los niños puedan coger algo de eso", dijo.

Explicó el producto de las cosechas sirve de apoyo en caso de crisis y también se entrega a City Harvest, organización que asegura que llegue a quienes no tienen comida.

Jardín se valoriza

El jardín está en un vecindario en crecimiento, en donde a sus habitantes el salario no les alcanza y donde los impuestos están subiendo también.

"Estas propiedades han subido mucho en valor. Tenemos la preocupación que estas tierras que antes no eran de nadie, ahora se están convirtiendo una área de oro porque la ciudad se está expandiendo y tienen ahora como meta este vecindario. Porque entre los vecindarios está Fishtown y este es el más económico", indicó Brown.

"Estas propiedades son de nosotros, pero si no las quieren quitar tenemos que luchar", agregó.

  • LEAVE A COMMENT:

  • Join the discussion! Leave a comment.

  • or
  • REGISTER
  • to comment.
  • LEAVE A COMMENT:

  • Join the discussion! Leave a comment.

  • or
  • REGISTER
  • to comment.
00:00 / 00:00
Ads destiny link