Tengo que ser honesto sobre Cole Hamels.

Yo creía que los
Phillies estaban locos cuando ellos utilizaron su primera selección en
la primera ronda del sorteo de novatos del 2002 para escoger a Hamels.

En
aquel entonces, Hamels tenia 18 años de edad, se acababa de graduar de
la escuela superior y no  había jugado a la pelota durante el año
anterior porque se había roto el hueso que va desde el codo hasta el
hombro, del brazo con el que lanzaba.

Para muchas
organizaciones, 16 de ellas que escogieron en el sorteo antes que los
Phillies, Filadelfia hizo el papel de ridículo cuando tomó a Hamels.
Especialmente cuando los Phillies le pagaron al zurdo un bono de $2
Millones. Eso fue $300,000 más de lo que le dieron a Chase Utley para
que firmara con ellos dos años antes. Utley siempre estuvo sano, 
siempre lucía como un buen bateador, y siempre cargaba la etiqueta de
futura estrella. En cambio, Hamels tenía etiqueta de mercancía
defectuosa.

Problemas de salud en los últimos cuatro años
aumentaron las preocupaciones sobre la fragilidad física de Hamels en
muchos círculos. El nativo de San Diego, California, pasó más de un mes
en la lista de los lesionados en el 2004 con tendinitis en su codo
izquierdo. En el 2005, él no participó en los campos de entrenamiento
en la primavera porque se estaba recuperando de una cirugía en su mano
izquierda. Ese año, Hamels pitcheó por sólo un mes. Él tuvo que cesar
de pitchear a mediados de julio porque su espalda sufría de espasmos.
En el 2006, Hamels subió a las Mayores pero pasó un tiempito en la
lista de los deshabilitados por dolencias en su hombro izquierdo. El
año pasado, Hamels terminó otra vez en la lista de los enfermos con
molestias en su codo izquierdo. A finales de la temporada pasada, él y
los Phillies debatieron, en la prensa, los méritos del equipo de
proveerle los servicios de un quiropráctico cuando el club iba de gira.
El conflicto se resolvió, por fin cuando los Phillies por fin
accedieron a la demanda esta primavera. Ahora un quiropráctico es parte
del cuerpo medico del equipo.

Hamels tuvo tremenda temporada el
año pasado (15-5, 3.39 y 276 K‚s en 183.1 entradas) y fue una de las
razones porque los Phillies llegaron a los playoffs. En el invierno, él
y el equipo no llegaron a un acuerdo financiero para un contrato de
largo plazo y los Phillies ejercieron su poder bajo el convenio
colectivo para asignarle un contrato al pitcher. Hamels y los demás
jugadores con menos de dos años en las Grandes Ligas, no tiene muchos
derechos en cuanto a negociar sus contratos. Hamels terminó con un
contrato de $500,000 para el 2007. Una cantidad que el espigado pitcher
declaró un insulto.

Todo indicaba que el 2008 iba a ser una
temporada de padecimientos físicos y problemas de actitud para Hamels.
No ha sido así. En vez, Hamels ha sido el as del equipo y su marca de
5-3, 2.61 y 65 K‚s después de sus primeras 10 salidas, lo pone en
camino a terminar el año como uno de los mejores pitchers del Viejo
Circuito. Lo más impresionante era que Hamels tenia una racha de 19
entradas consecutivas sin permitir carrera.

Las crónicas de
Hamels tienen un comienzo dificultoso pero si él sigue pitcheando como
va, él terminará con una historia digna para Cooperstown.