LIVE STREAMING
AL DIA file photo.
AL DIA file photo.

Lo que sabemos sobre la batalla por mantener estatus ‘santuario’ en Philly

Parte dos del reporte sobre las implicaciones de modificar el estatus de Filadelfia como 'ciudad santuario'.

MÁS EN ESTA SECCIÓN

¿Cuáles son las preocupacion

Protección Temporal

La economía está estancada

Buenas noticias empresarios

Adiós a un 'problem solver'

Combatiendo la adicción

Un problema sin vencimiento

Cultura latina dividida

COMPARTA ESTE CONTENIDO:

Quedándole apenas seis semanas para ocupar su cargo, el alcalde Michael Nutter demandó cambios importantes que reducen la condición de “ciudad santuario” en Filadelfia y la protección que ofrece a los inmigrantes indocumentados.

En una reunión a puerta cerrada, el subalcalde Everett Gillison dijo a grupos de derechos de inmigrantes que Nutter está preparado a modificar una orden ejecutiva que aprobó con su firma hace 18 meses. Actualmente, el decreto ejecutivo prohíbe a oficiales de la policía local cooperar con oficiales federales del Servicio de Inmigración y Aduanas (ICE) en la mayoría de los casos en que una persona indocumentada ha sido detenida. Gillison dijo que los cambios se tratarán con urgencia y sin una audiencia pública, con la intención de renovar cierta, aunque no toda, la cooperación entre las agencias de cumplimiento de la ley federales y locales. 

Esta noticia tiene implicaciones incalculables para las comunidades de inmigrantes de toda Filadelfia. A continuación lo que sabemos hasta ahora.

Las condiciones del estatus “santuario” en Filadelfia cambiarán, pero no está claro en qué medida. Aún no está disponible un borrador oficial de los cambios pero la oficina del alcalde dijo que lo presentaría a la mayor brevedad posible. Según confirmaron las fuentes presentes durante la reunión, el mensaje comunicado por Gillison por parte de Nutter no fue bien recibido.

“Francamente hubo muchas ambigüedades”, dijo Wendy Castor Hess, abogada de inmigración que estuvo presente. “Gillison estaba claramente incómodo. No conocía muchos de los detalles, y si los conocía, no estaba dispuesto a compartirlos. Pero esto se aprobará con urgencia y no hubo mucho aviso a nadie”.

La invitación a la reunión a puerta cerrada fue enviada a principios de la semana, según indicó la Oficina de Inmigración y Asuntos Multiculturales del Alcalde (MOIMA). Quienes asistieron incluían a unos 30 a 40 interesados.

Entre los presentes  se encontraba Juntos, organización con sede en el sur de Filadelfia que trabaja con inmigrantes, el grupo de defensa de los estadounidenses-camboyanos One Love, y el Movimiento Nuevo Santuario. Carlos Giralt-Cabrales, el cónsul de México en Filadelfia, quien en septiembre elogió la creación de una bienvenida a casa para los inmigrantes mexicanos en el Festival de la Independencia mexicana de Filadelfia, también se sintió consternado al conocer que Nutter había estado planificando esto durante varios meses. (No pudimos comunicarnos con el Cónsul a tiempo para la publicación de este artículo).

Gillison dijo que la nueva política permitiría la cooperación local y federal únicamente  en casos de personas indocumentadas acusadas de asesinato, violación, robo, violencia familiar, posesión ilegal de un arma de fuego, o actividad “terrorista”. Varios asistentes dijeron que Gillison dejó muy claro que la nueva política no incluirá detenciones en casos de delitos no violentos como detenciones de tránsito, anteriormente utilizadas por agentes de ICE para detener y deportar a personas indocumnetadas.

“Tenemos varias ideas sobre cómo se podría modificar el decreto”, declaró Gillison al Inquirer. “Estoy intentando redactar aquello que es sentido común. Si se sospecha que una persona es un terrorista, y esa persona está bajo nuestra custodia, ¿no querríamos decirle a los agentes federales?”

Las fuentes dicen que se mencionó la posibilidad de informar sobre personas consideradas como una “amenaza a la seguridad pública”, un término cuya vaguedad suscitó preocupación.

La orden proviene directamente del gobierno del presidente Obama y del Departamento de Seguridad Nacional de los EE. UU.

El plan de Nutter fue el resultado de conversaciones sostenidas con el presidente Obama y el Ministro de Seguridad Nacional Jeh Johnson. Según dicen, Nutter ha estado conversando sobre esta política durante siete meses, pero su oficina acaba de empezar a elaborar el plan ahora.
Existe mucha especulación sobre el motivo detrás de esta decisión, pero muchas de las partes interesadas con las que habló AL DÍA no quisieron dar declaraciones oficiales hasta que se tuviera mayor claridad sobre los detalles.

El diálogo actual sobre la inmigración en la contienda para la presidencia de los EE. UU. ha tenido un efecto virulento. Los estados presentan más y más leyes contra la inmigración. Filadelfia es una entre quizá 12 ciudades que conversa con el Gobierno de Obama y el Departamento de Seguridad Nacional (DHS) sobre renovar la cooperación con el Servicio de Inmigración y Aduanas (ICE). 

El plan del alcalde Nutter fue el resultado de pláticas con el Presidente Obama y el Ministro de Seguridad Nacional Jeh Johnson. Y tampoco es el único.

Existen más de 200 jurisdicciones clasificadas como ciudades santuario en los EE. UU. En términos de políticas oficiales, muchas de éstas se remontan a finales de la década de los setenta. Las mismas no terminaron en una sala de interrogación nacional hasta el mes de julio de este año, cuando Kathryn Steinle fue asesinada a tiros en San Francisco por un inmigrante deportado cinco veces llamado Juan Francisco López-Sánchez.

La retórica polarizadora sobre la inmigración indocumentada se apoderó de la contienda a la presidencia de los EE.UU. y empezó a dar nueva forma al diálogo sobre las “ciudades santuario” en toda la nación. En Filadelfia, hasta  se exacerbó en la más reciente contienda para la alcaldía. Pero la realidad es que las “ciudades santuario” no son guaridas sin leyes donde los indocumentados pueden cometer crímenes sin temer retribuciones. Ese es un mito.

ICE tiene jurisdicción sin restricciones en los EE. UU. y los decretos ejecutivos como el que Nutter firmó significan únicamente que los organismos municipales no tienen que usar sus propios fondos y personal para ayudar a ICE a realizar sus obligaciones oficiales. Los inmigrantes indocumentados en Filadelfia han continuado siendo rastreados y deportados por ICE cada día desde que Filadelfia obtuvo su condición de “santuario”.

Sin embargo, el debate  aumentó de tono al poco tiempo después del asesinato de Steinle. En octubre, el Congreso fue tras las jurisdicciones con prácticas de santuario al amenazar sobre millones en financiamiento federal perdido. (A propósito, el alcalde electo Jim Kenney dijo que estaría dispuesto a renunciar al financiamiento para conservar la condición de santuario de Filadelfia). Semanas después de que se introdujera el proyecto de ley “Donald Trump”, el gobernador de Carolina del Norte, Pat McCrory firmó su propio proyecto de ley prohibiendo la creación de “ciudades santuario” en todo el estado. Nueva Jersey recientemente introdujo una ley similar. Los legisladores de Pensilvania también han estado presentando sus propios proyectos de ley contra los inmigrantes.