La
Organización Internacional para las
Migraciones (OIM) elaborará un "diagnóstico" de las dependencias
gubernamentales encargadas de atender a los migrantes "para emitir
recomendaciones" en torno a sus capacitaciones y manuales de
procedimiento, informó este lunes el Instituto Nacional de Migración (INM).

En
los próximos quince meses la organización internacional
documentará y difundirá "las buenas prácticas del Gobierno mexicano
con énfasis en la construcción de alianzas para una mejor atención
de los migrantes", en concreto las relacionadas con el Programa
Paisano y los Grupos Beta.

En el primero se informa de sus
derechos a los emigrantes
mexicanos que regresan por períodos cortos de tiempo a su país de
origen, mientras que los Grupos Beta son unidades dedicadas a la
protección de los inmigrantes, sean o no nacionales, que se
encuentran en México.

La iniciativa "se enmarca dentro de los
objetivos estratégicos de
la OIM en México, que buscan fortalecer las capacidades de las
instituciones involucradas directamente en la atención a toda la
población migrante en el país sea nacional o extranjera, regular o
irregular", señala en su comunicado el INM.

La idea de esta
colaboración es difundir los resultados en el
marco del Foro Mundial sobre Migración y Desarrollo (FMMD), que se
celebrará entre los próximos 8 y 11 de noviembre de 2010 en Puerto
Vallarta.

De ese modo se mostrarán las experiencias de México, un
país con
la triple condición de ser "origen, tránsito y destino" de
inmigrantes documentados.

El Programa Paisano acaba de cumplir
dos décadas en marcha y en
ese tiempo se ha centrado en mejorar la información sobre los
derechos de los nacionales para así permitirles denunciar y no
dejarse amedrentar por quienes quieren abusar de ellos cuando
regresan por vacaciones o en cortas estancias a México.

Por su
parte, los Grupos Beta tienen la misión de proteger los
derechos humanos de los migrantes independientemente de si son
documentados o indocumentados y realizar labores de orientación,
rescate y salvamento.

La mayor parte de las acciones de estas
unidades pretende asistir
a personas que tratan de llegar sin sus papeles en regla a Estados
Unidos a través de México, que comparte una frontera de 3.200
kilómetros con su vecino del norte.