Después de ser abandonado por sus padres en su infancia, Roger Huerta inició una especie de lucha libre contra  las adversidades en la que resultó victorioso y hoy es una de las superestrellas del deporte de las Artes Marciales Mixtas (MMA).

“He peleado toda mi vida, desde cuando era niño, y hoy, ya de mayor, me gustan las Artes Marciales Mixtas porque de esa manera puedo usar toda esa energía en algo bueno”, dijo Huerta.

“Las Artes Marciales Mixtas es un deporte relativamente nuevo, en el que se utilizan las llaves de lucha en la lona y los puños cuando uno está de pie”, explicó.

Nacido el 20 de mayo de 1983 en Los Ángeles, Huerta es hijo de un inmigrante mexicano y una salvadoreña, quienes se divorciaron cuando él tenía cinco años.

“Cuando mi papá dejó a mi mamá ella se puso como loca y me pegaba mucho, luego decidió llevarme a la casa de la familia en El Salvador donde viví hasta los siete años”, señaló el deportista que todavía recuerda el ruido de bombas y balazos en la capital en plena guerra civil salvadoreña.

“La última vez que vi a mi mamá fue cuando me trajo desde El Salvador a la puerta de la casa de mi papá en Texas. Un año después él decidió llevarme con su familia en San Juan de Los Lagos en Jalisco (México)”, agregó.

Huerta contó que para ayudar en la economía de la familia en México vendía rosarios y goma de mascar a los turistas que llegaban a visitar el pueblo.

“Mi papá tomaba mucho y un día decidió traerme de México para vivir junto a él y mi madrastra en Pharr (Texas). Un día mi papá no regresó y después de cuatro meses que no apareció mi madrastra me echó de la casa”, relató Huerta.

“Yo tenía 12 años y ya estaba cansado de la vida; pero unos amigos de una pandilla me cuidaron y a los 15 años una amiga de mi mamá, María King, pidió mi custodia”, contó Huerta quien no abandonó la escuela.

Huerta sobresalía en todos los deportes; pero destacó de manera especial en lucha greco romana.

Por sus méritos el entrenador, Bryan Ashford, le orientó para buscar una beca deportiva más un préstamo a largo plazo para estudiar Gerencia de Negocios.

A los 19 años Huerta fue adoptado por Jo Ramírez, su profesora de inglés de la secundaria que ya desde antes de hacer los trámites legales velaba porque el joven fuera bien en los estudios y en su vida personal.

“En el colegio seguí en el equipo de lucha greco romana, después comencé a practicar las Artes Marciales Mixtas y fui campeón en peso ligero del Campeonato Internacional de Peleas (IFC) y durante los últimos pasados tres años y medio participé en el Campeonato de la UFC”, comentó.

“Este año firmé contrato para participar en el Campeonato de Peleas Bellator (BFC) y mi primer combate será en abril en el Seminole Hard Rock en Hollywood (Florida)”, adelantó el campeón hispano.

En mayo de 2007, Huerta salió en la portada de la revista “Sports Illustrated” como la imagen destacada de la creciente popularidad del deporte.

“Mi vida fue muy dura cuando era pequeño, por eso tuve que crecer rápido y a mis 26 años siento que no pienso igual que mis demás amigos de la misma edad”, reflexionó.

“En mis estudios sólo me falta una materia para sacar mi título de gerente de negocios y en el deporte lo único que quiero es ser campeón del mundo”, finalizó.