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Herederos de la "parapolítica" se cuelan en el Congreso

Los legisladores colombianos vinculados con la parapolítica en el 2007, lograron mantener sus influencias mediante un nuevo partido, el PIN.

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Los legisladores colombianos que salieron
del Congreso al ser vinculados con paramilitares, en el escándalo de
la "parapolítica" de 2007, lograron mantener sus influencias
mediante un nuevo partido, el PIN, que se colocó como la cuarta
fuerza política en las elecciones del domingo.

Con un escrutinio del 75,56 por ciento, el Partido de Integración
Nacional (PIN) obtuvo el 6,8 por ciento de los sufragios, un
porcentaje similar a Cambio Radical, constituido por liberales
disidentes, y el izquierdista Polo Democrático Alternativo (PDA).

Creadoo para estos comicios, el PIN reagrupó a colectividades y
personas acusadas de tener vínculos con paramilitares, lo que ahora
ha permitido que esa ideología de extrema derecha se mantenga en el
Congreso colombiano.

El PIN nació en el 2009 tras la desaparición de Convergencia
Ciudadana, formación afín al presidente Álvaro Uribe y fundada por
el ex senador Luis Alberto Gil y el antiguo gobernador del
departamento de Santander, el ex mayor del Ejército Hugo Aguilar.

Gil está preso por sus vínculos con la "parapolítica", que llevó
a un tercio de los representantes del Congreso a ser investigados,
encarcelados e incluso condenados por sus nexos con las antiguas
Autodefensas Unidas de Colombia (AUC), los paramilitares de la
ultraderecha armada.

Aguilar, bajo investigación, integró el comando del Ejército que
abatió al capo del cartel de Medellín, Pablo Escobar, en 1993.

Ante la controversia que despertaron aquellos congresistas, que
debieron abandonar el Legislativo, el nuevo PIN ha llenado su lista
con familiares y allegados de esos políticos.

Así, para el Senado se inscribió Doris Clemencia Vega, esposa de
Gil, y Nerhink Mauricio Aguilar, hijo del ex gobernador Aguilar.

A este partido se unieron ex congresistas cuyos partidos no han
recibido el beneplácito de la autoridad electoral para concurrir el
domingo a las urnas, es el caso Viviana Patricia Blel, sobrina del
investigado Vicente Blel y quien pertenecía a la proscrita Alianza
Democrática Nacional (ADN), también de tendencia uribista.

Teresa García Romero, hermana de Álvaro García Romero, quien fue
procesado por sus vínculos con paramilitares del departamento de
Sucre (norte), también integra el nuevo partido.

Otros de los miembros del PIN son Hernando Alberto de la
Espriella y Raúl Alberto Vives, hermanos de Miguel Alfonso de la
Espriella y Luis Eduardo Vives, respectivamente, quienes pasaron por
prisión a causa de aquel escándalo.

En la lista de este controvertida formación hay políticos que
fueron apoyados por la empresaria de apuestas Enilse López, alias
"La Gata", quien fue procesada por lavado de activos, entre ellos su
hijo Héctor Julio Alfonso.

También Antonio José Correa, quien fuera secretario de Educación
de la localidad de Magangué cuando Jorge Luis Alfonso López, el
primogénito de "La Gata", era alcalde de ese municipio.

Escrutado el 75,56 por ciento de los votos emitidos en las
elecciones del domingo, tendrían asegurado un escaño en el Senado
por el PIN al menos cuatro de ellos.

Se trataría de Doris Clemencia Vega, Nerhink Mauricio Aguilar,
Teresa García Romero y Héctor Julio Alfonso.