El ex presidente de Guatemala Alfonso
Portillo (2000-2004), reclamado en EE.UU. por el delito de lavado de
dinero, fue internado el sábado en un centro militar debido a quebrantos
de salud no especificados, informaron fuentes oficiales.

Un portavoz del Ejército dijo a periodistas que Portillo, quien la noche del viernes sorpresivamente había sido devuelto de una cárcel de máxima
seguridad a una prisión preventiva, está en observación en el Centro
Médico Militar.

Según la fuente, la Dirección del Sistema Penitenciario les
solicitó que el ex mandatario fuese trasladado a ese nosocomio
debido a su quebranto de salud.

Portillo, de acuerdo con uno de sus abogados, Telésforo Guerra,
padece de bronquitis debido a las bajas temperaturas que se
registraban en la cárcel de Fraijanes II, a unos 22 kilómetros al
sureste de la capital, donde permaneció cinco días.

Por ahora se desconoce cuánto tiempo estará el ex gobernante en
el centro hospitalario.

Por una resolución del Tribunal Quinto de Sentencia Penal, el
detenido fue regresado anoche al Centro Preventivo para Hombres de
la Zona 18, en el norte de la capital, de donde fue trasladado hoy
al centro médico militar.

Según la resolución judicial, "no se cumplían los requisitos"
para que Portillo fuera enviado a una cárcel de máxima seguridad,
por lo que ordenó su traslado a la prisión preventiva.

El pasado jueves, otro tribunal había rechazado, por
improcedente, un recurso de exhibición personal en el que el abogado
Guerra pedía la vuelta de su cliente a la prisión preventiva por
considerar que estaba en "condiciones infrahumanas" en la cárcel de
máxima seguridad.

Sin embargo, el Tribunal Quinto de Sentencia Penal, por
unanimidad, resolvió ayer que el ex presidente debía regresar al
centro preventivo, dándole la razón a otro de los recursos
presentados por Guerra.

"Nos dimos cuenta de que no se cumplen con los requisitos, porque
los centros de detención de máxima seguridad están destinados para
cumplimiento de penas", detalló el Tribunal en su resolución.

El ex presidente guatemalteco fue enviado el pasado lunes,
también de forma sorpresiva, a una cárcel de máxima seguridad
conocida como Fraijanes II, a unos 22 kilómetros al sureste de la
ciudad.

Esa cárcel está destinada para reos de alta peligrosidad y para
quienes ya hayan sido sentenciados por los tribunales.

El traslado a Fraijanes II, según explicó en su oportunidad el
ministro de Gobernación (Interior), Raúl González, era para
resguardar la integridad física del ex mandatario.

Portillo fue capturado el pasado 22 de enero en una playa delCaribe guatemalteco a petición de los Estados Unidos, que lo reclama
en extradición por lavado de dinero.

Según las autoridades estadounidenses, el ex mandatario
guatemalteco habría utilizado la banca de ese país para lavar unos
70 millones de dólares.

Desde la captura de Portillo, el Tribunal fijó un plazo de 40
días para que EE.UU. presente las pruebas que sustenten la petición
de extradición.

El ex presidente también enfrenta ante los tribunales
guatemaltecos un juicio por peculado, delito por el que fue
extraditado de México en octubre de 2008, y por el que se libró de
la detención preventiva tras pagar una fianza de unos 120.000
dólares.

Según la demanda judicial, Portillo deberá responder ante la
justicia por la malversación de unos 120 millones de quetzales (14,9
millones de dólares).