El ministro de Comercio, Industria y
Turismo (MCIT), Luis Guillermo Plata, ve difícil la aprobación del
Tratado de Libre Comercio (TLC) con Estados Unidos, pendiente de
ratificación desde hace tres años, lo que abre puertas a acuerdos
comerciales con otros países.

"El tema (del TLC) está complicado, estuvimos hablando con el
subsecretario de Estado y varios congresistas, pero la realidad es
que ellos tienen una política comercial un poco difícil", reconoció
Plata en una entrevista que publica hoy el diario El Tiempo.

El titular del MCIT dijo que "hay que estar listos para cuando
haya una ventana de oportunidad", por lo que en 2010 continuarán
"negociando, ratificando y poniendo en vigor tratados comerciales"
con Canadá, Corea del Sur, Panamá y República Dominicana.

También queda pendiente el acuerdo comercial de Colombia y Perú
con la Unión Europea, para el que se celebrará una ronda de
negociaciones en Lima entre el 18 y el 23 de enero, en la que se
espera cerrar la negociación respecto a los temas de pesca e
impuestos a las exportaciones, entre otros.

"No se pueden abrir mercados con los productos de siempre",
reflexionó el ministro, quien anunció que su cartera planea trabajar
en la transformación productiva, para lo que van a sumar a los ocho
sectores con los que ya trabajaban otros cuatro más del agro.

Con esta medida esperan recuperar niveles de exportaciones de
35.000 millones de dólares, "sin depender de factores puntuales como
el precio de una materia prima", aseguró.

El comercio exterior colombiano se vio afectado por muchos
problemas en 2009, entre los que Plata destacó la caída del precio
del dólar, la depreciación de las materias primas, la crisis
financiera internacional, el conflicto diplomático y comercial con
Venezuela y las salvaguardas aplicadas por Ecuador.

Venezuela congeló las relaciones comerciales con Colombia el
pasado agosto, y en los primeros 10 meses de 2009 las exportaciones
colombianas a su vecino cayeron un 22 por ciento, según la Cámara de
Comercio Colombo Venezolana.

"Ya este golpe lo asumimos y Colombia dijo: si se nos cierran
estas puertas, abriremos otras. ¿Cuál es el costo para Venezuela de
no comprarnos por una decisión política, pero sí a otros con un
dólar subsidiado?", se preguntó Plata.

El TLC entre Bogotá y Washington fue firmado a finales de 2006,
pero el Congreso de Estados Unidos no lo ha ratificado bajo el
argumento de que se debe mejorar la situación de derechos humanos en
Colombia y parar la violencia contra los sindicalistas.