El contralor de Nueva York, Thomas
DiNapoli, difundió hoy un informe que destaca que para el 2008 los
inmigrantes aportaban 215.000 millones de dólares a la actividad
económica de la Gran Manzana, lo que significa el 32 por ciento del
producto bruto de la ciudad.

El informe "El papel de los inmigrantes en la economía de la
ciudad de Nueva York", que DiNapoli presentó en conferencia de
prensa, destaca que los inmigrantes provienen de 148 países, pero el
52% de éstos nacieron en la República Dominicana, seguida por China,
Jamaica, México, Guayana, Ecuador, Haití, Trinidad y Tobago, Rusia y
Corea.

Señala además que en 2008, los inmigrantes representaban el 36,4%
de la población de la ciudad (tres millones de habitantes) así como
el 43% de la fuerza laboral (1,9 millones trabajadores).

El mayor crecimiento se registró entre 1990 y 2000, cuando la
cantidad de personas nacidas en el extranjero creció en un 38 por
ciento y la del país cayó en un 2%.

Igualmente el informe indica que entre el 2000 y 2008, el número
de trabajadores inmigrantes creció en un 68% por ciento, sus
salarios aumentaron en alrededor del 39% y su contribución al
producto bruto aumentó en un 61%.

La media de ingresos por hogar de los nacidos en el extranjero
que viven en la ciudad prácticamente se duplicó de 23.900 dólares en
1990 a 45.000 en 2007, con un crecimiento más rápido que la
inflación, según el estudio, basado en datos del Censo.

Agrega que debido a que han aumentado sus ingresos, muchos se han
convertido en propietarios de viviendas, con lo que se consolidan
aún más sus lazos con la ciudad, a la vez que destaca que el número
de inmigrantes dueños de sus hogares se duplicó entre 1991 y 2008.

Para 2008, representaban el 60 por ciento de todos los
propietarios de vivienda en la ciudad.

De los 55 vecindarios definidos por el Censo en esta ciudad, la
población de inmigrantes en nueve de éstos excede el 50%, y en otros
diez, representan entre el 40 y 50%.

En general, los vecindarios de Queens -el condado de mayor
diversidad étnica de la nación- y Brooklyn tienen las más altas
concentraciones de personas nacidas en el extranjero, con 47% y 37%,
respectivamente.

Nueve de los diez vecindarios con la mayor concentración de
inmigrantes están situados en Queens y Brooklyn y provienen
principalmente de América Central y del Sur (México, Ecuador,
Colombia, Guyana) el Caribe (República Dominicana, Haití, Trinidad y
Tobago), Rusia, China y otras partes de Asia.

Esos 10 vecindarios, agrega el estudio, tuvieron un crecimiento
económico entre el 2000 y 2007 más fuerte que el resto de la ciudad.

La cantidad de empresas creció en un 14,8%, mucho más rápido que
el resto de la ciudad (3,3%), y la mayor parte se concentró en
pequeños negocios con menos de 20 empleados.

En cuanto a las ocupaciones de la población inmigrante, DiNapoli
señaló que están presentes en diversos sectores, desde médicos y
enfermeras, contables, taxistas, y la industria de la construcción,
entre otras profesiones.

En la industria de servicios personales (manicura, tintorería,
etc), los inmigrantes son el 68 por ciento de los trabajadores; en
la construcción el 56 por ciento de los obreros así como el 56 por
ciento en los servicios de reparaciones y organizaciones
comunitarias.

En otras áreas como la manufactura son el 53% de los
trabajadores; en servicios de salud y sociales el 50%; en transporte
el 47%; en comercio minorista y mayorista el 47%.

En el condado de Queens, conforman más de la mitad de la fuerza
laboral, con un porcentaje superior al resto de los vecindarios
mientras en Brooklyn son el 48% y en El Bronx constituyen el 80% de
las empresas de servicios personales, con la concentración más alta
de todas las industrias en los distintos vecindarios.

En Manhattan, representan la mayoría en los sectores de ocio y
hospitalidad, comercio minorista y construcción.

Otros oficios que concentran la mayor parte de los trabajadores
nacidos en el extranjero: conductores de taxis (87%); mucamas y amas
de llave (83%); trabajadores gastronómicos (79%); cocineros (77%);
asistentes personales y de atención en el hogar (75%); chefs y jefes
de cocineros (74%); trabajadores de la construcción (73%);
asistentes de enfermería y siquiátricos (72%).