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Matanza en Puerto Rico sería por venganza

El asesinato de ocho personas conmociona a la sociedad puertorriqueña.

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El propio gobernador, Luis Fortuño, catalogó las muertes de "actos sin sentido".

 

El asesinato de ocho personas en una localidad del norte de Puerto Rico por un supuesto ajuste de cuentas ha conmocionado a una sociedad golpeada por la violencia y el tráfico de drogas.

El superintendente de Policía, José Figueroa Sancha, señaló hoy que se llevan a cabo todos los esfuerzos posibles para detener a los responsables del múltiple asesinato el pasado sábado, cuando unos desconocidos abrieron fuego sobre vecinos concentrados en un establecimiento de la localidad de Sabana Seca, en la costa norte.

Figueroa Sancha dijo no poder dar datos todavía sobre quiénes son los responsables de los asesinatos, pero sí aclaró que con toda probabilidad el motivo de la masacre es un acto de represalia relacionado con la lucha por el control de puntos de venta de droga. La prensa concede hoy sus espacios más destacados a un asesinato masivo que ha impacto a una sociedad de por sí acostumbrada a las noticias sobre muertes violentas, que en lo que va de año alcanzan las 710.

El propio gobernador, Luis Fortuño, se refirió al asesinato masivo de Sabana Seca para señalar que el pueblo puertorriqueño no puede aceptar ese tipo de hechos, que catalogó de "actos sin sentido".

"A los responsables de estos actos les vamos a seguir y les vamos a encontrar", sostuvo el líder del Ejecutivo, que se acercó al hospital donde se encuentran ingresados los 20 heridos para interesarse por su estado de salud.

Por su parte, el director del Centro Médico de Río Piedras, donde fueron internados los heridos, Ernesto Torres, indicó que no corre riesgo la vida de ninguno de los acribillados el pasado sábado.

Las autoridades de Toa Baja, el municipio al que pertenece la localidad de Sabana Baja, subrayaron hoy que era predecible -aunque no a un nivel como el ocurrido- un incidente violento relacionado con el control por los puntos de venta de droga.

El alcalde de Toa Baja, Aníbal Vega Borges, aclaró que desde que un joven de ese municipio fue asesinado hace un mes cuando estaba ingresado en el Centro Médico de Río Piedras era predecible un incidente violento de represalia.

Vega Borges indicó además que según los datos que ha podido recabar, el tiroteo fue protagonizado por un grupo de entre tres y cuatro pistoleros.

Cerca de un centenar de personas disfrutaban de una fiesta en un bar de la localidad de Sabana Seca, "La Tómbola", cuando, de forma repentina, irrumpió en el lugar un grupo de desconocidos que abrió fuego contra los presentes causando la muerte a ocho vecinos y dejando heridos a otros veinte.

Los asesinos utilizaron fusiles semi-automáticos de los modelos AK-47 y AR-15 y revólveres de los calibres 9 y 40, según se pudo comprobar al recoger los más de cien casquillos de bala que quedaron en el lugar, informó el coronel José Morales Vázquez, director regional de la Policía de Bayamón, en la que se incluye Sabana Seca. La masacre fue la más elevada en número de la historia reciente de Puerto Rico relacionada con la delincuencia o el narcotráfico, ya que el asesinato de 19 personas ocurrido en la ciudad sureña de Ponce en 1937 estuvo ligado a una marcha no autorizada de independentistas.

Fortuño recordó coincidiendo con los asesinatos que su Gobierno promueve la implantación de una ley que prohíba la venta de alcohol a partir de la medianoche entre lunes y jueves, y después de las dos de la madrugada los viernes y sábados.

El gobernador ha resaltado muchas veces que el alcohol está destrozando a los jóvenes puertorriqueños, además de ser responsable de decenas de muertes cada fin se semana en las carreteras de la isla.

Cerca del 80 por ciento de los asesinatos ocurridos en Puerto Rico están relacionados directamente con el tráfico de drogas, según el director de la División de Drogas y Vicios de la Policía de San Juan, Félix Bauso.

La violencia es una de las consecuencias del paso de las drogas en Puerto Rico, convertido en puente para el tráfico de estupefacientes hacia Estados Unidos.

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