César Nava fue elegido hoy presidente del gobernante Partido de Acción Nacional mexicano (PAN), tras ser el único candidato que concurrió a la votación para el puesto, indicaron a Efe fuentes de la formación política.

Nava se impuso por 290 votos a favor y 39 nulos, de los 370 consejeros del órgano. Estaban presentes en el Consejo Nacional del partido conservador 349 delegados, sin que el partido haya dilucidado de momento el porqué de la falta de sus votos en el cómputo.

Nava permanecerá en el cargo hasta diciembre de 2010, fecha en la que acababa el periodo de mandato del anterior presidente, Germán Martínez, que dimitió.

Nada más conocer su nombramiento, anunciado por Martínez, el nuevo líder subió al estrado del Consejo Nacional, en la sede capitalina del partido, para abrazarse con una gran sonrisa a sus compañeros.

Nava fue secretario personal del actual presidente mexicano, Felipe Calderón, durante una etapa de su mandato de casi dos años y se le consideraba la mano derecha del mandatario.

Ahora deberá enfrentarse al reto de recomponer ante la ciudadanía un partido que ha sufrido un duro varapalo en las recientes elecciones legislativas del pasado 5 de julio, desgastado por la crisis económica y la violencia del narcotráfico.

El PAN pasó de ser la primera fuerza política en la Cámara de Diputados al verse superado por el Partido Revolucionario Institucional (PRI), que obtuvo 237 escaños por 143 del PAN y se hizo así con el control efectivo de la Cámara baja.

Esto supone un escollo para Calderón, que se verá forzado a negociar para sacar adelante las reformas que planeaba para el segundo trienio de su Gobierno.

El partido perdió también cinco de las seis gubernaturas en liza, algunas de ellas consideradas bastiones del PAN.

Los decepcionantes resultados electorales forzaron la dimisión del entonces presidente del PAN, Germán Martínez, alineado con el presidente Calderón.

Martínez reconoció sin ambages el fracaso y optó por hacerse a un lado. "No obtuvimos mayoritariamente esa confianza (de los ciudadanos)", dijo en su intervención hoy ante el Consejo Nacional del partido previa a la votación.

Martínez, que se caracterizó durante su presidencia por sus virulentos ataques a sus rivales políticos, no contuvo tampoco en su discurso de este sábado las salvas y se refirió al "manejo parcial, faccioso y embustero de muchos gobernadores priistas que conducen sus Estados como haciendas personales".

La salida de Martínez obligó a buscar un nuevo presidente panista, cargo al que optó Nava, lo que despertó voces críticas en el seno del partido que lo veían como una imposición de Felipe Calderón, a quien es muy cercano.

Nava acababa de ser electo en julio como diputado federal por uno de los distritos de la capital mexicana.

Ningún otro panista optó por postularse frente a él, pese al malestar que su candidatura única producía en un sector, que, de acuerdo a la prensa local, se alineaba con el ex presidente de México Vicente Fox (2000-2006).

Entre ellos se hallaban el ex presidente del PAN Manuel Espino (2005-2007) y el senador Santiago Creel, que perdió frente a Calderón la pugna por la candidatura conservadora a las presidenciales de 2006.

En su intervención ante el consejo del PAN, antes de ganar la presidencia, Nava propuso la creación de una comisión para "la reflexión y el análisis de los procesos electorales de 2009".

Nava se regocijó de haber vivido "los dos mundos del PAN" en sus 21 años de militancia: el correspondiente al partido en la oposición, que vivió en las décadas de los ochenta y noventa, y el triunfo que situó al partido en el poder tras la victoria de Fox en 2000.

Quien anunció el triunfo de Nava no fue otro que Germán Martínez, con una evidente alegría en la voz. A su lado estaba sentado Felipe Calderón, que aplaudió el nombramiento. El mandatario había emitido su voto sobre las 10.30 hora local (15.30 GMT).