La venta de drogas en los vecindarios y calles de Filadelfia es un mal que aqueja y preocupa a todos.

Uno de los retos más importantes en la lucha contra este tráfico es lograr que la comunidad denuncie o dé testimonio de los actos ilícitos que presencia en su vecindario.

La concejal del distrito 7, María Quiñones,  está consciente de que la venta de drogas es uno de los retos más grandes en su distrito.  Así como también sabe que aunque la comunidad quiera combatir este problema, son muchas las barreras que detiene a los vecinos para hacer una denuncia, entre ellos, el miedo.

Es por eso que además de hablar a la Policía cuando se tiene la sospecha o se sabe del intercambio de drogas en la esquina o  en la calle, existe la opción de contactar directamente a los concejales de su distrito correspondiente.

“Afortunadamente, recibimos muchas llamadas de esta índole, la gente se siente más cómoda llamándonos directamente a nosotros y eso está muy bien; sin embargo no tenemos la autoridad de arrestar a nadie y lo reportamos al oficial de Policía, al capitán, al inspector o a la Oficina de Narcóticos correspondiente”, dijo Quiñones.

La información que en su oficina reciben, muchas veces facilita la investigación de casos que se están investigando en el momento y otras veces inicia uno nuevo.

Sin embargo, según explicó el teniente Stephen Clark, uno de los mayores retos en los casos de investigación de venta de droga es obtener información de la comunidad.

“Los mejores observadores son aquellos que viven en la comunidad, por eso los exhortamos a que si tienen sospechas, se fijen en cada detalle, números de placas, nombres, apodos, señas, horas y tiempos de las ventas, que reporten toda la información que puedan”, dijo Clark.

“En este tipo de investigaciones, cualquier detalle, por mínimo que parezca es importante. Por ejemplo, si la venta se realizó a pie, o en un automóvil”, dijo Clark.

Pero el miedo en la comunidad es muy grande, dijo la concejal Quiñones, “la confidencialidad es lo que más se teme, el problema de las drogas ha estado en nuestras calles por décadas, pero las personas que están vendiendo drogas son sus vecinos, sus amigos y familia”.

El teniente también aconsejó a la comunidad no intentar confrontar nunca a un vendedor y en caso de ver alguna situación de emergencia llamar inmediatamente al 911.

Clark explicó que existe una línea de teléfono confidencial, así como una página de internet para dar información, enfatizó que es discreto y anónimo.

Para denunciar la venta de droga anónimamente llame al 215 685 DRUG o en internet en www.ppdonline.org.

“Lo importante es mejorar nuestra calidad de vida”, dijo Quiñones.