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Cheney y la CIA en líos por callar

Demócratas sugieren que Cheney violó la ley al ocultar plan antiterrorista.

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El ex vicepresidente de Estados Unidos Dick Cheney pudo haber violado la ley al ordenar a la CIA ocultar al Congreso un programa antiterrorista, dijeron hoy demócratas de alto rango, que pidieron una investigación al respecto.

La presidenta del Comité de Inteligencia del Senado, la demócrata Dianne Feinstein, confirmó que Cheney prohibió a la agencia de espionaje informar del programa, establecido tras los atentados del 11 de septiembre de 2001, pero del que solo se sabe públicamente su existencia.

Feinstein dijo en la cadena de televisión Fox News que la decisión de ocultarlo "es un gran problema" porque "se apartó de la ley".

"Tiene que ser investigado", recalcó en el canal ABC Dick Durbin, el "número dos" de los demócratas en el Senado, quien afirmó que el ocultamiento del programa "no es solo erróneo, sino que podría ser ilegal".

"Dar al presidente un poder sin ningún control va más allá de lo que permite la Constitución", remarcó.

Cheney, que no ha hecho comentarios al respecto, no pudo contar hoy ni siquiera con el respaldo de sus correligionarios.

El senador republicano Judd Gregg, por ejemplo, reconoció en CNN que "la información debió ser compartida" con el Congreso y lo mismo opinó su colega John Cornyn en Fox News.

La Ley de Seguridad Nacional de 1947 obliga al presidente de Estados Unidos a mantener "totalmente informados" a los comités de inteligencia del Congreso sobre actividades "de inteligencia".

No obstante, la disposición es algo ambigua al señalar también que esas sesiones explicativas deben ser llevadas a cabo "en la medida en que tienen en cuenta la prevención de la divulgación no autorizada de información clasificada".

Feinstein y otro pequeño grupo de legisladores de alto rango se enteraron de la existencia del programa el 24 de junio, en una reunión con el actual director de la CIA, Leon Panetta, quien aparentemente supo de él un día antes y de inmediato suspendió sus actividades.

En el encuentro con los legisladores, Panetta afirmó que "Cheney había ordenado que no se informara al Congreso" sobre ese proyecto antiterrorista, según Feinstein.

De este modo, la senadora confirmó un artículo publicado el sábado en Internet por el diario The New York Times, que citaba solo dos fuentes anónimas.

Otras fuentes han indicado a diversos medios estadounidenses que el programa nunca estuvo en plena operación en los ocho años en que se encontró activo.

La investigación sobre la legalidad de la decisión tomada por Cheney podría coincidir con otra eventual pesquisa sobre si agentes de la CIA cometieron crímenes por sus maltratos a detenidos durante los interrogatorios.

El fiscal general, Eric Holder, presuntamente se inclina en favor de designar a un fiscal independiente para investigar si la CIA violó la ley.

La información fue publicada inicialmente por la revista Newsweek y confirmada por otros medios de prensa.

Se sabe que algunos detenidos fueron sometidos a asfixias simuladas, privación del sueño, vejaciones y exposición al frío, y que abogados del Gobierno de George W. Bush dieron cobertura legal a esas acciones.

No obstante, aparentemente algunos agentes de la CIA sobrepasaron incluso los límites amplios de lo que les estaba permitido entonces.

Un proceso penal contra ellos chocaría con el deseo del presidente de Estados Unidos, Barack Obama, "de mirar hacia adelante y no hacia atrás", como ha indicado en repetidas ocasiones.

Sin embargo, la responsabilidad final del fiscal general en el sistema de Gobierno estadounidense es ser el guardián de la Constitución, por lo que Holder podría abrir la investigación incluso si eso desagrada a Obama.

Los debates de hoy en los programas dominicales de entrevistas de la televisión estadounidense dieron una muestra de la polémica que esa medida generaría.

Cornyn dijo que investigar a agentes de la CIA sería una decisión "terrible", mientras que Gregg se quejó de que los ataques "continuados" contra la agencia socavan las operaciones de inteligencia de Estados Unidos.