LIVE STREAMING

Sigue condena a golpe, pero critican a OEA y "acompañantes"

Hubo dos muertos y niegan disparos de policías o militares contra manifestantes. (resumen)

MÁS EN ESTA SECCIÓN

¿Cuáles son las preocupacion

Protección Temporal

La economía está estancada

Buenas noticias empresarios

Adiós a un 'problem solver'

Combatiendo la adicción

Un problema sin vencimiento

Cultura latina dividida

COMPARTA ESTE CONTENIDO:

 

La comunidad internacional sigue firme en su rechazo al golpe en Honduras, pero al mismo tiempo surgen críticas al papel de la OEA y de los presidentes que respaldaron al depuesto Manuel Zelaya en su fallido viaje de regreso a su país.

Las mayores críticas provienen de Venezuela, donde la Mesa de la Unidad Democrática, que agrupa a once partidos de la oposición, denunció que la Organización de Estados Americanos (OEA) está volcada en el caso de Honduras y no se preocupa de lo que ocurre en territorio venezolano.

En Venezuela "no existe Estado de derecho, pero eso no lo ve la OEA ni (su secretario general, José Miguel) Insulza", "parcial a favor de Hugo (Chávez) y de la 'banda de los cuatro': Nicaragua, Bolivia, Cuba y Ecuador, beneficiarios del dinero que nos roban", dijo Henry Ramos Allup, de la socialdemócrata Acción Democrática.

"Señor secretario general de la OEA: no se haga el tonto que nosotros sabemos que usted sabe lo que está ocurriendo en Venezuela; tenga vergüenza y no se convierta en un altavoz del tirano (Chávez) que despotiza a Venezuela", añadió en una rueda de prensa.

La alianza opositora habló así en respaldo del alcalde Metropolitano de Caracas, Antonio Ledezma, quien desde el pasado viernes cumple una huelga de hambre en la sede del organismo interamericano en demanda de que la OEA verifique "in situ" que en Venezuela "no hay democracia".

Ramos se refirió también al hecho de que Zelaya intentase volver ayer a su país a bordo de un avión venezolano.

"El capitán Araña (Chávez) puso el avión, los pilotos, la ruta y dio las instrucciones, pero desde aquí no más; el 4 de febrero de 1992 (fecha del fallido golpe de Estado dado por Chávez) fue igual" y mientras los soldados bajo su mando peleaban, "se quedó en el Museo Militar".

Chávez no acompañó a Zelaya "por prudencia", pero el presidente depuesto sí tuvo cerca a los mandatarios de Argentina, Ecuador y Paraguay, los cuales han recibido críticas en sus respectivos países por ese motivo.

La argentina Cristina Fernández, el ecuatoriano Rafael Correa y Fernando Lugo pensaban viajar con Zelaya a Tegucigalpa, pero finalmente se quedaron en San Salvador, donde horas después se reunió con ellos Zelaya, al que las nuevas autoridades hondureñas impidieron poner pie en su país.

El intento agravó la situación en Honduras, donde por primera vez desde el golpe del 28 de junio la violencia política se cobró vidas.

Al menos dos personas murieron a causa de disparos en las inmediaciones del aeropuerto, donde ayer se concentraron simpatizantes de Zelaya.

Mauricio Macri, alcalde de Buenos Aires y líder de la opositora Propuesta Republicana (PRO), consideró que la crisis en Honduras es "importante", pero opinó que Fernández debe darle "más prioridad" a los temas locales.

El gobernador de la provincia de Chubut, Mario Das Neves, dijo que la mandataria "debería haber estado acá", ya que el país tiene "problemas serios que resolver", y la diputada Fernanda Gil Lozano, de la opositora Coalición Cívica, consideró "inoportuno y fuera de lugar" el viaje de Fernández.

"En el país estamos con problemas gravísimos como la gripe A como para que ella se ausente", sostuvo a Efe.

Lugo también fue blanco de críticas y no solo de la oposición.

El dirigente campesino Belarmino Balbuena, de una agrupación de izquierda afín al Gobierno, sostuvo que el gobernante "llamativamente" se ausenta del país cuando "hay conflictos"

Por su parte, la presidenta del opositor Partido Colorado, Lilian Samaniego, cuestionó la ausencia de Lugo en momentos en que las autoridades sanitarias tratan de articular nuevas medidas de prevención para frenar la expansión de la gripe A.

"El presidente tiene que entender que tenemos problemas graves en el país, a lo económico y social ahora se ha sumado el de la salud. Él debería estar liderando una campaña para hacer frente a esta situación", afirmó Samaniego.

Correa también fue puesto en tela de juicio, en este caso por el hecho de que en 2005 estuviera de parte de los que destituyeron a Lucio Gutiérrez como jefe de Estado de Ecuador e incluso fuera miembro del gabinete de Alfredo Palacio, quien le reemplazó.

En un artículo publicado hoy en el diario "La Hora", el analista José Hidalgo dice que lo de Honduras ha evidenciado "la fragilidad e inmadurez de las democracias latinoamericanas" y opina que la "indignación" de algunos se debe solo "al afán de defender a uno de los suyos".

Correa "saltó a la escena política formando parte de un Gobierno nacido de otra sucesión ilegal y a quien no le pareció mal que, ya en su administración, el Tribunal Supremo Electoral se bajara al Congreso, en una maniobra tan burda y grave como la que ahora rechaza indignado", señala Hidalgo.

Para el analista, también resulta "irónico" que el presidente de Venezuela "se dio a conocer, precisamente, cuando quiso derrocar a un Gobierno (bueno o malo) democráticamente constituido", en 1992.

Otro analista ecuatoriano, Simón Pachano, rompió una lanza a favor de la OEA por su actuación en el caso de Honduras, que, según dice, "hace renacer una mínima confianza en ese organismo y que debe satisfacer a cualquier persona que valore y defienda la democracia".

Pachano se refiere a "cuestionamientos" al protagonismo de Chávez y sus aliados en la firme postura de la OEA respecto a Honduras, el tercer país más pobre de América y cuya participación en el organismo ha sido suspendida.

"Más bien habría que saludar la adscripción de los miembros de la ALBA a una corriente en la que no querían embarcarse, pero de la que no podrán salir de aquí en adelante. Si antes llamaron babosada a la Carta Democrática, ya no podrán hacerlo después de esto, ni siquiera cuando sea invocada en algún problema en uno de esos países", anota.

El obispo nicaragüense Bernardo Hombach coincidió en que es "importante defender la democracia y la legalidad" en Honduras, pero contrastó la "gran beligerancia" mostrada por la OEA e Insulza en este caso con el silencio del organismo en torno al presunto fraude en los comicios municipales de noviembre pasado en Nicaragua.

"Muchos nicaragüenses se preguntan: cuando hubo fraude en Nicaragua, allí la OEA no intervino de ninguna forma", reprochó el religioso, quien también criticó al gobernante Daniel Ortega por dar prioridad a la crisis de Honduras y no a los problemas de su país.

En el mismo sentido se pronunció el ex vicepresidente de Nicaragua José Rizo, quien destacó que si bien los problemas de los vecinos no les pueden ser indiferentes, "la responsabilidad primaria" de un "Gobierno responsable" es con su propio país.