Alrededor de una decena de jóvenes, la mayoría residentes del oeste de la ciudad y estudiantes de la escuela Sunrise Philadelphia Inc., una organización sin fines de lucro que ofrece un programa de después de la escuela que imparte entrenamiento de oficios vocacionales de restauración, trabajan dos horas al día, cinco días de la semana restaurando residencias.

Algunas de las casas antiguas están tan maltratadas que se deberían demoler, explicó la fiscal de Distrito, Lynne M. Abraham. Debido a su deterioro, la ciudad le vendió la primera casa a $1 en el 2003 a esta organización educativa.

A los estudiantes les tomó cuatro años remodelar esa casa, la cual fue vendida en $75.000, cantidad que se utilizó para cubrir los gasto de materiales y salario. Los estudiantes reciben un sueldo de $5 por hora.

Para Abraham, esto ha resultado una gran idea, ya que mantiene a los jóvenes ocupados, aprenden destrezas y se revitaliza el barrio.

La casa en la que los estudiantes trabajan actualmente fue adquirida en enero de este año y está ubicada en la calle 9 y Miffiln, en el sur de la ciudad.

Vea cómo lo reportó el The Inquirer.