La campaña electoral en Ecuador, que
concluirá el próximo jueves a la medianoche, se centró el lunes en los
ataques verbales entre el presidente del país, Rafael Correa,
candidato a repetir en el poder, con los aspirantes opositores.

Correa, que el lunes efectuó su campaña electoral en la ciudad andina
de Cuenca, en el sur del país, acusó a uno de sus contrincantes, el
ex presidente Lucio Gutiérrez, de mentir cuando asevera que en su
Gobierno (enero 2003-abril 2005) no aplicó medidas de ajuste
económico contra la población.

Gutiérrez asegura que en su mandato los precios de los productos
básicos no subieron, como sucede actualmente, por lo que Correa
respondió y le llamo "cara de tuco (sinvergüenza)" y dijo que ya
ningún ecuatoriano "cree en estos farsantes".

Además, el jefe del Estado, que pretende otro periodo en el poder
de cuatro años, señaló que sus adversarios se han dedicado a
agredirlo en la campaña, porque "saben que van a perder" en las
elecciones generales del próximo domingo.

Sin embargo, Gutiérrez, en un mitin de su partido político,
Sociedad Patriótica en Guayaquil, aseguró que, según encuestas de
las que dispone, pero que no reveló, existe un empate técnico entre
él y Correa, por el primer lugar de la elección presidencial.

"Lo importante de esto", dijo Gutiérrez, "es que habrá segunda
vuelta electoral" el próximo 14 de junio.

Gutiérrez, además, hizo un llamamiento al Consejo Nacional
Electoral (CNE) para que impida que se alteren los resultados
electorales que vaticinó.

También pidió al organismo impedir que Correa pueda hacer
proselitismo político después del jueves, día en que concluirá la
campaña electoral.

Gutiérrez dijo temer que Correa, aprovechando su condición de
jefe del Estado, pueda usar medios de comunicación después del
cierre de la campaña para promocionarse, ante lo cual aseguró que él
haría lo mismo, en caso de que esto llegue a suceder.

Incluso dijo que no teme ir a la cárcel si el CNE le castiga de
ese modo por hacer campaña electoral, si Correa lo hace fuera del
periodo establecido.

Por su parte, otra candidata presidencial, la socialista Martha
Roldós, expresó su preocupación por el método que usará el CNE para
el recuento preliminar de votos.

Roldós dudó de la efectividad de las denominadas "juntas
intermedias", creadas por el CNE en esta ocasión para agilizar el
escrutinio preliminar.

De su lado, el candidato Álvaro Noboa, también en la oposición,
pidió a sus compatriotas que voten por él para defender la
dolarización de la economía nacional, adoptada desde el año 2000,
pues aseguró que Correa pretende eliminar ese sistema monetario,
extremo negado por el actual mandatario.

Noboa, un multimillonario que acude por cuarta ocasión
consecutiva a una elección presidencial, en un mitin en su ciudad
natal de Guayaquil, pidió a los electores defender a esa urbe de los
supuestos abusos de poder de Correa.

"Si quieren ayudar a Guayaquil tienen que votar por Álvaro Noboa
para presidente y por (Jaime) Nebot para alcalde", aseguró el
magnate bananero, que con esa declaración apoyó directamente al
burgomaestre de la ciudad portuaria, un opositor a Correa que
también corre para la reelección.