(Actualización a las 5:16 p.m. tiempo del este)

En su primera reacción pública ante los medios, Bill Richardson justificó hoy su decisión de retirarse de la nominación para dirigir el Departamento de Comercio, y además dijo sentirse dolido por tomar una decisión tan dura.

(Esta es la nota que se publicó ayer por la tarde, justo después del anuncio oficial divulgado por los medios).

Bill Richardson, gobernador de Nuevo México, abandonó la nominación para dirigir el Departamento de Comercio en la administración del presidente electo Barack Obama tras una investigación federal que se sigue en su contra, informó la agencia de noticias Associated Press (AP).

Richardson fue el primer hispano en ser nominado a un puesto en el gabinete dentro de la administración de Barack Obama, quien tomará la presidencia el próximo 20 de enero.

(Actualizado con información de EFE a las 3:21 p.m.)

La agencia española de noticias EFE reporta que un jurado investiga cómo una compañía de California que realizó
donaciones políticas a Richardson logró un lucrativo contrato con el
gobierno de Nuevo México.

"Déjenme decir claramente que tanto yo como mi administración
hemos obrado debidamente y que esta investigación lo pondrá de
manifiesto", afirmó Richardson en un comunicado divulgado por el
equipo de transición de Obama.

"Pero he concluido que la investigación también obligaría a un
insostenible retraso en el proceso de confirmación", añadió el
político de origen hispano.

Precisó que dada la gravedad de la crisis económica en el país
considera inoportuno pedir al presidente electo que retrase "el
importante trabajo que hay que hacer".

Obama señaló en el citado comunicado que acepta la decisión del
gobernador de Nuevo México con "profundo pesar".

"El gobernador Richardson es un excelente funcionario público",
indicó el próximo inquilino de la Casa Blanca, quien insistió en que
habría sido un valioso activo en su equipo económico.

"En una muestra de su voluntad de poner la nación por delante se
ha retirado como candidato para el gabinete con el fin de evitar
cualquier retraso a la hora de cubrir este importante puesto
económico en momentos críticos", subrayó Obama.

Richardson indicó que planea continuar en sus funciones de
gobernador.

"Aprecio la confianza que el presidente Obama ha depositado en mí
y aprecio su amistad (...). Le dije que estoy ansioso de servir en
el futuro en la forma que él considere más útil", señaló.

Richardson, de 61 años, fue embajador ante la Organización de
Naciones Unidas (ONU) y secretario de Energía durante la presidencia
de Bill Clinton. Además de Gobernador, Richardson también sirvió
como legislador en la Cámara de Representantes entre 1983 y 1997.