La falta de diversidad e inclusión de latinos en las juntas directivas de las corporaciones estadounidenses fue el tema de una conversación con Cid Wilson, presidente del Hispanic Association on Corporate Responsibility (HACR, por sus siglas en inglés).

Wilson obtuvo su primer empleo en Wall Street en una oficina de clasificación de correspondencia y fue subiendo la escalera corporativa hasta convertirse en un reconocido analista financiero.

“Conforme fui escalando era cada vez más evidente que cada vez había menos latinos”, dijo Wilson durante un evento organizada por AL DÍA News la semana pasada, al que asistió un selecto grupo de invitados. “A medida que avanzamos tenemos que recordar de dejar esa escalera por la que subimos para que otros puedan subir”, agregó. 

Mientras que la población latina en EE.UU. representa el 17 por ciento, los latinos solo ocupan el 3 por ciento de asientos en las juntas directivas de las compañías del Fortune 500.

Por otra parte, esta población tiene un poder adquisitivo de unos $1,5 billones de dólares, de los cuales las mujeres latinas son responsables de la decisiones de compra de más de un billón. Sin embargo, las mujeres latinas representan poco más del uno por ciento en las juntas directivas de las 500 corporaciones con mayores ganancias, según Wilson.

“Si no hay latinos ni latinas en las juntas corporativas, ¿cómo puede una compañía tener la dirección adecuada para capturar ese mercado?”, dijo Wilson. “La diversidad e inclusión es clave para el éxito de un negocio”.

Por otra parte, agregó que debido a la lealtad que los consumidores latinos tienen hacia las marcas que logran establecer una conexión con ellos, las corporaciones que han fallado en hacerlo enfrentan grandes retos para capturar este creciente mercado. 

Estos son solo algunos de los motivos por los que su mensaje y el de la organización que representa es que la inclusión de diversidad en las juntas corporativas no solo es cuestión de hacer lo correcto sino que además es una buena estrategia de negocios.

Por otra parte, advirtió que las compañías cuya estrategia para llegar a los consumidores latinos está basada tan solo en la mercadotecnia —y no en la inclusión de latinos en distintos niveles— corren el riesgo de fracasar en su intento. 

“Hay una correlación entre tener más diversidad en tu junta y llegar a los consumidores latinos”, dijo Wilson. “En teoría, puedes mejorar tus ganancias si tienes una mejor estrategia de diversidad”.

Por un lado, uno de los retos que enfrenta HACR es convencer a los altos ejecutivos de las corporaciones estadounidenses sobre la importancia y el valor de la inclusión de latinos en su junta.

Por el otro, asegurarse que una vez que las compañías estén listas para nombrar a un latinos a su junta directiva, haya candidatos listos para servir.

Para dicho propósito, HACR cuenta con una variedad de programas enfocados en identificar y trabajar con latinos que se desempeñan en niveles de gran importancia dentro una corporación, en ocasiones, tan solo unos cuantos niveles debajo del presidente de la organización o CEO. Esto con la esperanza de que se continúen desarrollando para aumentar sus posibilidades de llegar a formar parte de una junta corporativa.