Ofrecer alimentos a aquellas personas que carecen de acceso a ellos es una de las principales tareas de diversas organizaciones de Filadelfia. Un servicio a la comunidad más desamparada que en marzo de 2012 hizo peligrar la prohibición instaurada por el entonces alcalde Michael Nutter, que vetaba la distribución de comida en lugares públicos de Filadelfia.

La medida, sin embargo, no llegó nunca a hacerse efectiva, pues varias organizaciones de la ciudad llevaron el asunto a la corte federal, donde el 9 de agosto de ese mismo año se prohibió la implementación de la misma por mandamiento judicial.

Ahora, casi cuatro años después de toda la disputa generada, el alcalde Kenney ha anunciado la eliminación de la prohibición de servir comida en lugares públicos.

“La solución a la hambruna y a la falta de un hogar no es estigmatizarlo y esconderlo del ojo público”, dijo el alcalde Jim Kenney. “Comparto con los demandantes un compromiso firmo de servir a aquellos en necesidad. Junto con otros que abogan por las personas sin hogar, continuaremos acometiendo planes a corto y a largo plazo para mejorar la distribución de la comida y otros servicios vitales y, finalmente, acabar con el hambre y las personas que carecen de un hogar en Filadelfia”.

Por otro lado, tanto la ciudad de Filadelfia como aquellos que llevaron el asunto a los tribunales en el año 2012, han pedido que el mandamiento judicial que la evitaba la implantación de la prohibición sea desestimada.

Cabe destacar que un año después de establecer la prohibición, la Ciudad de Filadelfia estableció Food Access Collaborative, con la intención de mejorar el acceso a servicios relacionados con la alimentación de los habitantes más desfavorecidos.