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By integrating diverse learning styles and fostering collaboration, the ExCITe Center catalyzes community around tech education. Photo: ExCITe Center at Drexel University
Al integrar diverso estilos de aprendizaje y fomentar la colaboración, el ExCITe Center cataliza la comunidad en torno a la innovación tecnológica. Photo: Drexel University ExCITe Center

La decodificación de la cultura tecnológica: Los educadores de Filadelfia reconfiguran la forma en que la juventud se conecta con la tecnología

Al volver a imaginar las formas en que los jóvenes se enfocan en educacion tecnológica, Filadelfia puede liberar su potencial para la innovación tecnológica.

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Dr. Youngmoo Kim no recomienda que alentemos a nuestros hijos a convertirse en el próximo Bill Gates.

En la Conferencia TEDXPhiladelphia 2019, el profesor de ingeniería y Director del Centro Tecnologías de interacción expresiva y creativa (ExCITe por sus siglas en inglés) de Drexel University hizo una comparación entre la manera en que nuestra sociedad piensa en los íconos de la industria tecnológica, como Gates, Steve Jobs y Mark Zuckerberg, y los íconos de la música clásica como Bach, Mozart y Beethoven.

Kim, un músico de formación que se convirtió en profesor de ingeniería, cree que la monocultura de la industria tecnológica limita las posibilidades de la invención y la innovación.

Según Kim, si les estamos pidiendo a los jóvenes que sigan las huellas de los ídolos tecnológicos como Gates, Jobs y Zuckerberg, nuestra sociedad nunca verá surgir más posibilidades tecnológicas interesantes; es decir, equivalentes evolucionarios al jazz, Motown, Hip-hop y cumbia en la música.

En vez, Kim desafía a los innovadores jóvenes a que piensen más como Louis Armstrong, Diana Ross, Grandmaster Flash, o quizá Totó la Momposina.

“La industria tecnológica ha tratado tanto de inyectar la cultura tecnológica dentro de la tendencia dominante”, dijo Kim, “pero lo que realmente necesita es un trasplante cultural --cambiar una monocultura masculina blanca y asiática excluyente por una de representación e inclusión equitativa”.

La cultura de dominio masculino blanco de Silicon Valley no sólo inhibe el ingenio, en una época en la que las tecnologías están incorporadas en casi toda faceta de nuestras experiencias de vida diarias, las ramificaciones desbordantes de la monocultura son más peligrosas.

La falta de perspectivas diversas en el diseño de nuevas tecnologías permiten que los sesgos raciales y de género discriminatorios continúen sin control.

Los impactos del subrepresentación

Un ejemplo de ello es un estudio publicado a principios de este año por las investigadoras Joy Buolamwini y Deborah Raji en el que se descubrió que el software de reconocimiento facial de Amazon, Rekognition, no tiene la capacidad de discernir el género de las mujeres de color de forma efectiva.  

Pese a los hallazgos importantes, Amazon continúa comercializando el software a los organismos locales y federales a cargo del cumplimiento de la ley, entre ellos al Servicio de Inmigración y Control de Aduanas de los EE. UU. (ICE por sus siglas en inglés).

Esta falta de responsabilidad es un resultado directo de la subrepresentación de personas de color en el sector privado de la tecnología.

Un informe de 2016 que preparado por Reveal de  The Center for Investigative Reporting y la University of Massachusetts Amherst acumuló datos de los informes de Igualdad de oportunidades de empleo (EEO-1) de las principales empresas tecnológicas de Silicon Valley. El análisis descubrió que los empleados latinos constituían sólo el 7.3 por ciento de la fuerza laboral y los empleados afroamericanos, sólo el 2.5 por ciento. Ambos porcentajes bajan significativamente en los puestos de liderazgo ejecutivo.

Las latinas y afroamericanas sólo constituían el 2.4 por ciento y el 1.8 por ciento de todos los trabajadores en las empresas tecnológicas de Silicon Valley encuestadas. Ambos grupos caen debajo del 1 por ciento de representación a nivel ejecutivo.

Pero según Kim, los problemas son aún más profundos.

“Sobrepasa el sesgo implícito”, le dijo a AL DIA. “Está en el currículo, es cómo capacitamos, y cómo enseñamos”.

La encuesta 2018 Taulbee Survey realizada por la Computer Research Association  que Kim subraya en su TED Talk ofrece evidencia. El estudio encontró que sólo el 8.4 por ciento de los títulos universitarios en ciencias de computación e ingeniería se le otorgan a graduados latinos y sólo 3.8 por ciento a graduados afroamericanos.

Esos porcentajes también caen significativamente con respecto a los títulos de maestría y doctorado.

La reimaginación de la cultura tecnológica

En el Centro ExCITe, Kim y un equipo de investigación transdisciplinario de educadores, tecnólogos, artistas y diseñadores están descubriendo formas creativas para abrir la cultura de la tecnología mediante un currículum educativo experimental.  

“El currículo (tecnológico) está integrado con suposiciones en cuanto a que las personas aprenderán mejor en una forma que funcionó bien para un número relativamente pequeño de hombres blancos”, le compartió Kim a AL DÍA.

“En cada etapa algún porcentaje de personas van a ser rechazadas o se sentirán desanimados”, continuó. “Y no necesariamente debido al racismo o misoginia explícita. Es sencillamente tan sutil como que su marco conceptual alrededor de esto no es la forma en que yo veo el mundo”.

Para aliviar este problema, el centro ExCITe Center uso enfoques alternos para la educación que integran las artes, humanidades y diseño para ayudar a los jóvenes a reconsiderar su relación con la tecnología y buscar nuevas rutas hacia el descubrimiento.

Los educadores de Filadelfia se propenen exponer a los estudiantes a toda la amplitud y profundidad de la ciencia y la tecnología, para que puedan ver que hay diferentes caminos hacia las carreras en estos campos. Foto: Drexel University ExCITe Center.

La educación STEAM (ciencias, tecnología, ingeniería, arte y matemáticas), en vez del formato STEM tradicional, es el enfoque fundamental del Centro ExCITe. Al integrar estilos de aprendizaje diversos y promover la colaboración, el centro cataliza la comunidad alrededor de la innovación tecnológica.

“Las personas aprenden mejor cuando es significativo para ellas. Las personas aprenden mejor cuando hacen algo, crean algo, construyen algo”, explicó Kim.  

Mediante talleres educacionales, grupos de inclusión, la colaboración empresarial comunitaria, y un campamento de verano imbuido de STEAM manejado en asociación con la Malcolm Jenkins Foundation, el centro ExCITe busca sembrar un ecosistema tecnológico equitativo en su comunidad local.

El despertar al potencial de la innovación de Filadelfia

Sin embargo, Youngmoo Kim y su equipo en el centro ExCITe no son los únicos educadores que están repensando formas en que las mentes jóvenes y diversas de Filadelfia pueden incidir a través de la tecnología.

En el Center for Inclusive Competitiveness de la Temple University, la Dra. Jamie Bracy está moldeando a los estudiantes afroamericanos y latinos en emprendedores tecnológicos.

El CIC, puesto en marcha en el 2017, busca avanzar la movilidad económica inclusiva al colocar a los estudiantes subrepresentados en caminos dirigidos a las carreras tecnológicas y actividades de emprendimiento en industrias de sostenibilidad urbana.

Las perspectivas de Bracey están en línea con las de Kim en cuanto a que la cultura en que criamos a nuestros hijos desempeña un papel indelible en cómo los estudiantes perciben sus oportunidades.

“Hay personas socializadas para apropiarse, inventar, impulsar, y hacer uso de las habilidades de otros y hay otras personas que están socializadas de manera que su único valor es el de entregar sus ideas, dijo Bracey.

Bracey, sin embargo, conoce precisamente cuánto tienen que ofrecer los estudiantes a quienes ella promueve en los campos de la tecnología y quiere verlos reconocer y valorar lo propio.

“Esta no es sencillamente una cuestión misionaria de “Ayudemos a los pobres”, le dijo a AL DÍA. “Es el hecho que se prevé que los EE. UU. empezarán a perder su eminencia tecnológica porque no invierte suficiente en la educación de los niños de las minorías”.

Bracey es contagiosamente apasionada sobre tu trabajo de abogacía.

Además de sus investigaciones en CIC, ella contribuye a la Digital Literacy Alliance de Filadelfia y trabaja en el ámbito estatal en el Consejo consultivo STEM del Ministerio de Educación, en la Computer Science for All initiative, el Equity Investment Fund del Black Women Leadership Council, y el Governor's Advisory Council on Diversity, Inclusion and Small Business Opportunities.

Bracey también fue electa Presidente de Matemática, Educación, Ciencias y Logros (MESA por sus siglas en inglés), un consorcio nacional que ofrece oportunidades para los niños de las minorías en programas avanzados de ciencias y tecnología.

Los programas STEM de Becas y PACTS en el Instituto Franklin sirven a estudiantes en el área de Filadelfia que son apasionados de la ciencia, la tecnología, la ingenería y las matemáticas. Foto: Instituto Franklin
Aunque reconoce que existen muchos desafíos que Filadelfia necesita superar para brindarles a los estudiantes los recursos que necesitan para alcanzar el éxito, su compromiso es contundente.

“Este es un tema que gira alrededor del acceso a recursos y a la pobreza. Y eso incluye pobreza de materiales y pobreza de pensamiento”, dijo.

Bracey ve las ventajas en cada joven residente de Filadelfia y su potencial para crear impacto.

“Toda persona dentro de Filadelfia es alguien que debería ser percibida como alguien con el potencial para transformar y la tecnología es una de las herramientas para lograrlo”, dijo.

Una oportunidad singular

El Dr. Darryl Williams, Vicepresidente principal de Ciencias y Educación en el Franklin Institute, también ve un enorme potencial para el ecosistema educacional de la ciencia y la tecnología.

Williams llegó recientemente a Filadelfia. Antes, trabajó como Director del Center for STEM Diversity en la Escuela de ingeniería de Tufts University.

Ha expresado una enorme confianza en la capacidad de Filadelfia de convertirse en un líder singular de talla mundial en la educación en ciencias y tecnología.

“Nos perjudicamos a nosotros mismos al duplicar esfuerzos y no tenemos que hacerlo porque tenemos muchas cosas buenas que suceden en esta ciudad”, dijo Williams.

El considera que todas las piezas están en su lugar --Filadelfia es el hogar de algunas de las universidades e instituciones científicas de mayor renombre en el mundo --pero quiere que la ciudad se organice, movilice sus recursos, y haga que los mismos sean más accesibles.  

“Tenemos que tener  una intención afianzada con respecto a crear una estrategia alrededor de la educación STEM desde una perspectiva de aprendizaje informal a una formal”, dijo Williams.

De manera similar a Kim y Bracey, Williams le dijo a AL DIA que su misión como educador es exponer a los estudiantes a la plena amplitud y esfera de la ciencia y la tecnología, para que ellos puedan ver que existen diferentes caminos hacia las carreras profesionales.

Aunque el Franklin Institute ha sido muy exitoso en cuanto a sus esfuerzos por contactar con los estudiantes afroamericanos en la región, Williams está impaciente por involucrar a más estudiantes latinos.

“Nos debería encantar tener estudiantes que representan a Filadelfia de forma amplia y verdadera y eso incluye a los estudiantes  procedentes de todos los códigos postales”, le dijo a AL DÍA.

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