Foro oficial de discusiones del siglo actual, creador de tendencias a nivel mundial, fuente de información al minuto... Los usos de Twitter son muchos y de lo más variados, inesperados y sorprendentemente reveladores, ¿el último en salir a la luz? su capacidad para predecir la tasa de  mortalidad por enfermedades relacionadas con el corazón de un condado, descubierta por un grupo de investigadores de la Universidad de Pennsylvania, la Northwestern University y la Universidad de Melbourne.

El estudio, publicado en Psychological Science, se ha centrado en el análisis de las emociones expresadas en cerca de 148 millones de mensajes publicados en la red social entre 2009 y 2010 en más de 1.300 condados de Estados Unidos, en los que habita un 88 por cien de la población del país. Una recopilación de sentimientos en 140 caracteres con la que los investigadores han sido capaces de elaborar un mapa de riesgo en función de los sentimientos expresados por los diferentes usuarios, comprobando que aquellas zonas caracterizadas por tweets cargados de ira, estrés o enfado registraron en realidad mayores tasas de mortalidad por enfermedades cardiovasculares ateroescleróticas (AHD), incluso teniendo en cuenta otros factores de riesgo (ingresos, nivel de educación, etc...), que los condados en los que sus usuarios se mostraban más optimistas y felices en Twitter.

Así, y mediante la elaboración de una especie de 'diccionario emocional', creado a partir de la recopilación de expresiones comunes relacionadas con diferentes estados de animo o palabras como ¨odio¨ o ¨maravilloso¨, el equipo investigador fue capaz de medir el estado anímico de las diferentes comunidades, estableciendo una relación con su tasa de mortalidad por dolencias relacionadas con el corazón. ¨El estado de ánimo siempre ha sido un factor de riesgo de enfermedades coronarias¨, según ha explicado Margaret Kern, una de las investigadoras participantes en el estudio. ¨Por ejemplo, sentimientos como la hostilidad o la depresión están ligados a enfermedades del corazón a nivel individual a través de sus efectos biológicos. Pero las emociones negativas pueden desencadenar diferentes comportamientos o respuestas sociales; ser más dado a beber, comer mal o aislarse del entorno, que indirectamente pueden conducir a una enfermedad coronaria¨.

Otra de las conclusiones del estudio, centrado más en un análisis a nivel comunitario que individual, ha sido la constatación, según sus creadores, de que este modelo creado tan solo con un análisis del lenguaje usado en Twitter como fuente principal es capaz de predecir el nivel de mortalidad por AHD de una manera más efectiva, por ejemplo, que aquellos elaborados mediante la combinación de factores comunes como el nivel socioeconómico o el estado de salud (diabetes, hipertensión u obesidad). ¨La relación entre el lenguaje y la mortalidad es especialmente sorprendente¨, ha confesado a Penn News uno de los encargados de llevar a cabo este trabajo, H. Andrew Schwartz. ¨Aunque la gente que expresa sentimientos considerados negativos no es necesariamente la que fallece a causa de enfermedades coronarias, ello si demuestra que si muchos de tus vecinos están enfadados, tienes más probabilidades de morir por una enfermedad coronaria¨.