Se llama Shigela, se transmite a través de agua o comida contaminada y la enfermedad que causa (shigellosis) tiene como principales síntomas diarrea, dolor abdominal o fiebre. Recuperarse es sencillo, en la mayoría de los casos no requiere tratamiento, en los más extremos solo antibióticos (el más común es el ciprofloxacin) para frenarla de manera más rápida, aunque sí es bastante contagiosa. La Shigela no es una bacteria que resulta ajena al país, es la responsable de cerca de 500.000 diarreas al año en Estados Unidos, sin embargo el Centro de Control y Prevención de Enfermedades alerta en su último informe de la existencia de varios casos de Shigela resistente al ciprofloxacin. 

El organismo ha registrado 243 casos (un 20 por ciento han requerido hospitalización) en 32 estados y Puerto Rico entre mayo de 2014 y febrero de 2015; una cifra no muy significativa, si se compara con el total, pero que obliga al Centro de Control y Prevención de Enfermedades a mantenerse en alerta. ¨Las infecciones resistentes a los medicamentos son difíciles de tratar y, dado que la Shigella se extiende con rapidez, la posibilidad de que el brote crezca es lo que nos preocupa. Por ello estamos actuando con rapidez para llevar a cabo una estrategia nacional para frenar la resistencia a los antibióticos porque no podemos dar por sentado que siempre tendremos le tratamiento que necesitamos para luchar contra infecciones comunes¨, explica el director del CDC Tom Frieden. En Estados Unidos, esta bacteria ya es resistente a antibióticos como ampicillin y trimethoprim/sulfamethoxazole.