El piloto del jet que se estrelló la tarde del lunes con todo el equipo y jugadores del equipo de futbol brasilero Champecoense, dijo a la torre de control que se encontraban sin combustible.

Las grabaciones de la torre de control de tráfico muestran a un piloto que solicita permiso inmediato para aterrizar en el Aeropuerto Internacional de Medellín debido a una “falla eléctrica total” y sin combustible a ocho millas del aeropuerto.

El intercambio entre la torre y el piloto fue estresante en algunos momentos. Puede escucharse repetidamente al piloto solicitar autorización para aterrizar el avión debido a “problemas de combustible”. La respuesta de la torre fue que otro avión había sido desviado por problemas mecánicos y que tenía prioridad. La torre insistió al piloto en que debía esperar siete minutos.

Mientras el avión se encontraba en espera constante, su piloto, desesperado, comunicó por radio que existía una “falla eléctrica completa, sin combustible”. Esta fue una de las últimas comunicaciones que el piloto tuvo con la torre antes de estrellarse contra un costado de la montaña.

La última comunicación del piloto antes de enmudecer mencionaba que volaba a una altura de 9000 pies y su última súplica a tierra fue: “vectores señorita. Aterrizando vectores”.

La agencia de aviación colombiana dijo que las cajas negras del avión habían sido recuperadas. Esto podría dar información más detallada sobre lo que sucedió antes del accidente. El director de la agencia, Alfredo Bocanegra, dijo que si bien la evidencia apunta inicialmente a un problema eléctrico, la posibilidad de que el accidente haya sido causado por falta de combustible no se ha descartado. Los aviones deben tener suficiente combustible para volar entre 30 y 45 minutos hacia otro aeropuerto en caso de una emergencia.

De la misma manera, el intercambio de comunicación que presentan los audios parecen confirmar los detalles mencionados por la azafata que logró sobrevivir y por un piloto que volaba en las cercanías y que logró escuchar el caótico intercambio. Hubo también la ausencia de explosión durante el impacto, lo que podría confirmar que el agotamiento de combustible fuese una de las causas del accidente.

Se espera que la investigación tome por lo menos algunos meses en completarse. La Junta de Seguridad Nacional de Transporte en los Estados Unidos está asistiendo la investigación pues un manufacturero americano fue quien construyó los motores de 17 años que poseía la aeronave.