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Austin Clay, de 24 años, fue el autor de la demolición. Destrozó la estrella con un pico. Al mediodía ya la habían reemplazado por una nueva. /FOTO: NBCNEWS

Destrozan por segunda vez la estrella de Trump en el Paseo de la Fama de Hollywood

El mismo autor del destrozo fue quien llamó a la policía y confesó lo que había hecho. "Nos vemos", dijo antes de colgar. Cuando los agentes llegaron al Paseo…

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El hombre sacó el pico que había escondido en el estuche de una guitarra y golpeó. Y volvió a golpear. El sonido atronador hizo pensar a algunos testigos que hacían obras en la calle a esa hora, pasadas las 3 de la madrugada del 25 de julio, hora del Pacífico.

Lo que hacía Austin Clay, de 24 años, era machacar la estrella del Paseo de la Fama de Hollywood con el nombre de Donald Trump. La estrella ha estado allí desde 2007 por, entre otras cosas, el éxito de Trump en el reality show "El Aprendiz".

Clay golpeó y volvió a golpear hasta dejar escombros de la estrella y las once letras del nombre de Trump.  El personal de seguridad intentó disuadirlo, pero Clay no se detuvo.

Karen Leong, una portavoz de la Policía de Los Ángeles, dijo a la prensa que fue Clay mismo quien llamó a la policía y les contó lo que había hecho. Antes de colgar dijo “nos vemos”. La policía llegó al Paseo de la Fama a las 3:30 am pero Clay se había ido. Una hora más tarde se entregó en la comisaría de Beverly Hills. Ahora enfrenta cargos por vandalismo y tendrá que pagar una fianza de $20,000. 

TMZ obtuvo un video que publicó en su cuenta de Twitter, con su acostrumbrado tono paparazzi. Se ve a Clay hincando el pico en la estrella, con esa fuerza que sale de la rabia, desde un lado y desde el otro.  Con las dos manos coge el pico, toma impulso desde detrás de su cabeza y desploma todo el peso del instrumento en el suelo, una vez y otra. Hay gente de pie, mirándolo. Clay abandona luego el pico junto a los escombros.

Una testigo citada por CNN dijo que “pensaba que era alguien haciendo obras”, porque Clay estaba muy concentrado “rompiendo el suelo”.  Otro testigo dijo a NBC que se acercó a Clay: “Yo le decía, ¿por qué estás golpeando la estrella?, ¿qué te hizo Donald Trump? Luego dobló la esquina y creo que se fue”.

Cuando el día aclaró, el cemento y las ruinas estaban allí protegidos con una barra de metal. Habían rayado los restos con un graffiti, informó CBS. Los transeúntes tomaron imágenes y algunos se llevaron trozos como souvenir.

The Atlantic publicó ayer que al mediodía ya habían puesto una estrella nueva. Un seguidor de Trump estuvo resguardando los escombros desde las 7:30 de la mañana. 

Austin Clay no fue el primero en demoler la estrella hollywoodense de Trump.

En octubre de 2016, en el apogeo de la campaña presidencial de las elecciones que terminaron haciendo a Trump presidente, James Otis la destrozó con un mazo y también un pico, vestido como obrero de la construcción. Dio entrevistas a la prensa. Dijo que quería reivindicar a las mujeres que acusaron a Trump de abuso y agresión sexual: en principio tenía la intención de robarse la estrella y venderla en subastas para dar el dinero a esas mujeres. Lo sentenciaron a tres años de libertad provisional y 20 días de trabajo comunitario, y pagó una multa de $3,700 al Hollywood Historic Trust, que es la entidad que hace el mantenimiento a las estrellas del Paseo de la Fama y $700 a la Cámara de Comercio de Hollywood, que es la que patrocina este trozo de calle de cerca de dos kilómetros de largo.

En julio de ese mismo año, un artista había rodeado la estrella de Trump con un muro de 15 centímetros, como una réplica del muro de los sueños del presidente para la frontera con México.

En el desfile del Resist Pride, en julio de 2017, cubrieron la estrella con calcomanías:  "Yo me #resisto al racismo”, “Yo me #resisto al extremismo.”

Alguien incluso confesó en las redes sociales, para luego borrarlo, que dejó que su perro defecara "accidentalmente" allí.

El 16 de enero de 2007 la Cámara de Comercio de Hollywood le dio la estrella número 2,327 a Donald Trump. Hace 11 años. “Su estilo de vida extravagante y sus maneras francas han hecho de él una celebridad durante años, un estatus que se ha amplificado con el éxito de los shows que ha producido, el concurso de belleza Miss Universo y El Aprendiz, de NBC", se lee en la página web del Paseo de la Fama.

Otro reporte de NBC reveló que por cada estrella  de este trozo de calle de Hollwywod se pagan $30,000 y que la entrega no se basa en el talento y la dedicación, sino en el dinero.

“Entre 20 y 30 celebridades piden su sección de fama cada año, y mientras un comité escoge entre cientos de solicitudes cada año, las estrellas no se otorgan”.