La soledad siempre se ha asociado con la vejez. Pensamos que es habitual sentirse solo durante los últimos años de vida, bien sea por la desaparición de seres queridos o porque la familia vive en lugares diferentes. Lo que no podíamos imaginarnos es que la soledad podría llegar a ser un gran problema de salud pública en Estados Unidos. Pero no entre la población más adulta, sino entre los jóvenes.

Un estudio realizado por conjuntamente por Cigna y Ipsos sobre la soledad, ha hecho que salten todas las alarmas. Durante la investigación se entrevistó a más de 20 mil adultos estadounidenses. Estos respondieron a una batería de 20 preguntas relacionadas con sus sentimientos de pertenencia a un grupo y sus relaciones con otras personas.

Los resultados resultan alarmantes. Según esta investigación son los jóvenes entre 18 y 22 años las personas más propensas a sentirse solos. Además, los investigadores resaltan que en estos resultados se han alcanzado puntuaciones muy altas, por encima incluso de lo que ellos mismos establecieron como “soledad”. Mientras la puntuación de esta generación joven alcanzaba los 44 puntos en la tabla, la generación más adulta, por encima de los 72 años, puntuaba 38.6 puntos. Esto sugiere que este grupo de edad, que era el que inicialmente preocupaba a los investigadores, ha encontrado los apoyos que necesita.

El problema

Al leer los datos de este informe, muchos sacarán una conclusión precipitada. “Esto es debido a la cantidad de tiempo que pasan en redes sociales”. Pero, sorprendentemente, esto no es así. O al menos no tiene tanto que ver como inicialmente pensamos. Según este estudio no existe una correlación entre el uso de redes sociales y la soledad.

Esta circunstancia más bien tendría que ver con la cantidad de trabajo que se les exige a los universitarios. Los jóvenes podrían estar priorizando aquellas actividades en las que se logran objetivos, en lugar de utilizar el tiempo para realizar conexiones con su entorno. Se trata de una exigencia de la sociedad que busca que el joven esté contínuamente produciendo.

Soledad y salud

La soledad puede tener importantes consecuencias para la salud pública. Una persona solitaria se cuida menos y su soledad le puede llevar desde abuso de sustancias hasta sufrir una enfermedad cardiaca. Acciones como ir al gimnasio, priorizar las reuniones con amigos y familiares en persona y mantener un equilibrio entre el trabajo y la vida personal, son básicas para mantener una buena salud.