Con el buen tiempo llegan los insectos a casa. Es habitual que en nuestro hogar se cuelen mosquitos pero también algunos otros pequeños insectos como arañas, cuyas picaduras pueden darnos un susto.

Reaccionar ante una picadura

La mayoría de veces descubrirás que te ha picado un insecto por la reacción de tu piel. Desgraciadamente la gran mayoría de personas saben distinguir la picadura de un mosquito ya que han sufrido sus consecuencias. Sin embargo, si las picaduras aparecen muy agrupadas y cercanas entre sí, puede que el insecto que te ha picado sea una garrapata. En el caso de la picadura de araña, esta suele ser similar a la de otros insectos aunque por lo general estas picaduras resultan más molestas y cuentan con un punto concreto de lesión que es fácilmente reconocible. Las avispas o abejas suelen ser una mancha roja con un pequeño punto en el medio.

Independientemente del insecto que te picara, si aplicas hielo de forma inmediata en la zona afectada, la inflamación y el picor bajará más rápidamente. Puedes utilizar también las lociones en roll-on disponibles en la farmacia.  Las cremas corticoides pueden ser de gran ayuda pero consulta con tu médico antes de aplicarla, sobre todo si la persona afectada es un niño. Evita administrar antihistamínicos sin hablar antes con tu médico y recuerda que si el insecto que te ha picado tenía aguijón, este debe ser retirado por un profesional médico.

Prevenir antes que curar

Es importante saber cómo reaccionar ante una picadura, pero más importante es si cabe protegerse contra los insectos y prevenir que estos problemas aparezcan. Para ello comienza por complicar la entrada de insectos a tu domicilio. Puedes cubrir puertas y ventanas con mosquiteras y aplicar difusores repelentes de insectos.  

Si estás fuera de casa, ten especial cuidado durante las horas previas al anochecer ya es durante estas horas cuando más insectos aparecen. Por último, si vas a salir de casa, recuerda proteger sobre todo a los más pequeños. Puedes aplicarles repelentes para ello pero ten en cuenta que los expertos recomiendan que hasta los dos años no se apliquen lociones con concentraciones de DEET superiores al 10%. Asegúrate de que siempre adquieres productos que pueda utilizar toda tu familia.