Los flujos privados de capital a
Latinoamérica alcanzarán este año los 214.000 millones de dólares,
frente a los 137.000 millones de 2009 y un 10% por debajo del récord
de 2007, dijo hoy la mayor agrupación bancaria del mundo.

El Instituto de Finanzas Internacionales (IIF), que agrupa a 420
bancos, mencionó que el previsto repunte será posible gracias al
atractivo que representan mercados como el brasileño, que acaparará,
según el IIF, 124.000 millones de dólares del total de flujos.

El grupo destacó que ha habido un repunte tanto de las
inversiones extranjeras directas como de las inversiones de cartera
en la región que serán, dijo, especialmente altas en Brasil.

La agrupación bancaria mencionó que ese desembarco de fondos
tiene como telón de fondo un escenario macroeconómico robusto que
llevará a la región a crecer cerca de un 6% este año, con Brasil,
Perú y Argentina al frente del pelotón.

El estudio de flujos de capitales a mercados emergentes divulgado
hoy destaca también que la capacidad utilizada está en niveles altos
en varios países y que la inversión empresarial está aumentando
rápidamente.

El IIF destacó que la abundante liquidez global, la menor
aversión al riesgo y los menores diferenciales permitieron un
incremento en las emisiones de deuda corporativa.

En total esas emisiones representaron el 46% de las emisiones de
bonos de mercados emergentes durante los primeros ocho meses del
año, comparado con el 16% del mismo periodo del 2009, dijo el IIF.

El informe indica que tan solo entre las empresas brasileñas
Vale, líder mundial en la producción de mineral de hierro, y Gerdau,
la primera productora de acero de Latinoamérica, colocaron emisiones
en los mercados por 8.700 millones de dólares en septiembre.

"Esperamos que el ritmo de préstamos siga siendo fuerte hasta
finales de año", destaca el estudio del IIF, que estima que las
emisiones de deuda corporativa alcancen los 45.000 millones de
dólares este año, más del doble que en el 2009.

Los banqueros insistieron, por lo demás, en que pese a los
crecientes déficit por cuenta corriente, el aumento en los flujos de
capital se ha traducido en una presión sostenida sobre la
apreciación de divisas en la región.

El IIF prevé que las reservas internacionales de divisas en la
zona sigan subiendo y alcancen la cifra récord de 546.000 millones
de dólares a finales de año, equivalente al valor de siete meses de
importaciones de bienes y servicios.

Pese a que en líneas generales la región atraviesa por un buen
momento, la agrupación de bancos mencionó que existen algunos casos
"problemáticos", como Ecuador y Venezuela, que se han quedado en el
vagón de cola con flujos netos de capital "anémicos".

Argentina, dijo el IIF, ha hecho algunos esfuerzos para
normalizar las condiciones con sus acreedores externos en los
últimos meses aunque tiene, todavía, "mucho trabajo pendiente".

Entre las tendencias interesantes en la zona, el IIF mencionó el
incremento de las inversiones directas de Brasil en el exterior.

En ese sentido, el informe apunta que alentadas por el deseo de
tener una presencia global en mercados, las inversiones de las
empresas brasileñas en el exterior alcanzaron los 18.300 millones de
dólares hasta agosto, frente a los 6.300 millones de dólares de un
año antes.

Esas inversiones se han concentrado en sectores en los que Brasil
tiene una ventaja competitiva como el de materias primas y
producción de alimentos.

El Banco Nacional de Desarrollo (BNDES) brasileño es la principal
vía de financiación de esa campaña de inversiones en el exterior.