Las siguientes recomendaciones buscan ayudar a sobresalir a la hora de presentar una entrevista de trabajo. Recuerde que no hay una segunda oportunidad para causar una primera buena impresión:

1.  Investigue en internet y con sus amistades sobre la compañía y prepárese con suficiente información de respaldo. No es necesario que conozca cada detalle de la empresa, pero sí debe saber lo esencial sobre la compañía para mostrar al entrevistador que está tomando muy en serio la oportunidad de ser entrevistado.

2. Vístase como profesional, no importa que tan relajada y moderna se vea la empresa. Aunque los directivos y empleados de la empresa usen ropa muy cómoda y casual, recuerde que “ellos ya tienen un trabajo”. Si es hombre, use traje oscuro o un saco formal, si es mujer, traje sastre y accesorios discretos.

3.  Prepárese mentalmente para el éxito. Es importante que se convenza de que tiene talentos y habilidades y que la industria se beneficiará de ellos. La conversación interna positiva se reflejará en tu actitud.

4.  Llegue con suficiente tiempo de anticipación, con una actitud serena y por lo menos con una copia impresa de alta calidad de su curriculum vitae. Recuerde que llegar a tiempo es su primera carta de presentación ante el entrevistador y es una muestra de su interés en la entrevista.

5.  Sea muy cortés con todas las personas de la empresa, oficiales de seguridad, recepcionistas, empleados de intendencia, asistentes, sólo por dar algunos ejemplos de las personas con quienes de encontrará. Recuerde: está siendo observado y evaluado, su actitud positiva es tomada en cuenta durante todo el proceso y los buenos modales nunca estarán pasados de moda.

6.  Muestre energía y entusiasmo. El entrevistador percibe los aspectos tangibles e intangibles de su persona. Los aspectos tangibles son sus conocimientos, experiencia y habilidades. Los aspectos intangibles son su actitud positiva y confianza en sí mismo, los cuales se transmiten a través del lenguaje verbal y no verbal. Sonría, haga contacto visual, levante los hombros y confíe en que todo saldrá bien.

7.  Piense y hable sobre lo que usted puede hacer por la compañía, no lo que la compañía puede hacer por usted. Debe enfocarse en cómo sus habilidades y experiencia servirán para mejorar los resultados de la compañía en todos los aspectos. No debe enfocarse los beneficios que usted obtendrá al trabajar en dicha compaña, tales como crecimiento profesional, prestaciones, etc.

8.  No hable sobre su vida personal, está haciendo una presentación de ventas, en la cual está “vendiendo” sus capacidades y experiencia para desempeñarse con excelencia en la empresa. La mayor parte del tiempo debe hablar sobre el aspecto laboral y como resolverá los problemas de la compañía. Tampoco hable de sus pasatiempos, de su equipo de futbol favorito o la música clásica, el entrevistador no quiere escuchar la historia de su vida, quiere conocerle en el aspecto profesional.

9.  Nunca se exprese negativamente de su ex jefes o ex compañeros de trabajo. Nunca critique, diga chismes o algo negativo sobre los demás aunque sea verdadero, porque solo lo hará lucir como una persona conflictiva o desagradecida con sus ex empleadores.

10.  No hable sobre salario, deje ese tema para el final. Enfóquese en el trabajo, su habilidad para contribuir y todas las grandes cosas que puede hacer antes de hablar sobre sus expectativas salariales. Permita que primero se enamoren de usted y de sus cualidades y que sean sus prospectos empleadores quienes saquen a relucir el tema del dinero.

11.  Sea amable y agradecido con sus entrevistadores por su tiempo, de nuevo esto habla de su educación y buenos modales. Al terminar la entrevista formal no diga nada negativo, continúe con una actitud prudente; el entrevistador sigue formándose una opinión de usted por lo que diga ya sea dentro o fuera del tiempo de entrevista.

12.  Envíe correos electrónicos de seguimiento. Agradezca a sus entrevistadores: las personas de Recursos Humanos y los Directivos del cada Departamento que solicitan el puesto. Esto ayuda a mantenerlo en la mente de los entrevistadores.