Premio Nóbel de Literatura 1982, Gabriel García Márquez, colocó una imagen de un loro en la portada de su libro "No vengo a decir un discurso", ya que tuvo esos animales desde niño y "casi aprendió a hablar con ellos", dijo hoy su editor, Cristóbal Pera.

El también director editorial de Random House Mondadori en México presentó el nuevo libro de García Márquez, que recopila 22 discursos pronunciados en 66 años, desde el que dio a los 17 años para despedir a sus compañeros de curso en 1944, hasta el que leyó en un homenaje en Cartagena de Indias (Colombia) en 2007.

El editor explicó que para él fue un gran privilegio colaborar estrechamente durante un año y medio en esta obra con el escritor colombiano, que reside en México.

Pera explicó que "Gabo" (como se le conoce popularmente) tiene un gran afecto por los loros y recordó que cuando le dieron el Premio Nóbel, tenía un ejemplar llamado "Carlitos" que salía en muchas de las fotos de la época.

"Siempre le han encantado los loros y cada vez que moría uno de ellos, sus padres le ponían otro al día siguiente y cuando Carlitos se murió, su esposa quitó la jaula vacía de ahí, pues sabía que se ponía muy triste. Ahora no tiene loros", indicó el editor.

Agregó que Gabo es "un hombre afable, encantador a quien le gusta leer toda la prensa por la mañana".

Durante la presentación, Pera indicó que actualmente trabajan en un tomo de la obra periodística de García Marquez y agregó que espera que el escritor concluya una novela titulada "Nos vemos en agosto", que "no acaba de terminar".

"Ojalá que la pueda dar por concluida y entonces tendríamos una gran sorpresa", subrayó.

En uno de los textos leídos en la presentación, García Márquez confesó en 1972 que por primera vez en su vida se presentó "de cuerpo presente y en pleno uso" de sus facultades" para hacer dos cosas que se había prometido no hacer jamás: "recibir un premio y decir un discurso".

En los pocos discursos públicos publicados -22 en 66 años "que son los que se encontraron"- se demuestra la reticencia del Nobel de Literatura a hacer uso de la oratoria, se muestran las profundas preocupaciones de García Márquez en torno a diversos temas políticos, periodísticos o sobre los problemas de América Latina.

También se evocan momentos en la vida del escritor, su amistad entrañable con Álvaro Mutis, con quien pactó no hablar uno del otro en público, "como una vacuna contra la viruela de los elogios mutuos",

El editor recordó que comenzó a trabajar con Gabo con la edición del libro autobiográfico "Vivir para contarla" cuando él vivía en Barcelona y el escritor se recuperaba de un cáncer en Los Ángeles.

El libro saldrá a la venta mañana viernes en España y Latinoamérica, indicó el editor.