El ritmo de ventas de viviendas nuevas en Estados Unidos disminuyó un 11,5 por ciento en agosto pasado y se ubicó en 460.000 unidades, el nivel más bajo en 17 años, informó el Departamento de Comercio.

Las ventas de casas nuevas han bajado un 34,5 por ciento en un año, mientras que el precio medio ha descendido un 6,2 por ciento en ese mismo periodo y en agosto era de 221.900 dólares.

La Asociación Nacional de Agentes de Bienes Raíces informó el miércoles de que el ritmo de ventas de casas y apartamentos usados se redujo un 2,2 por ciento en agosto y se ubicó en 4,91 millones de unidades anuales.

En un año, el ritmo de venta de viviendas usadas ha disminuido un 10,7 por ciento.

El precio medio de la vivienda usada ha bajado un 9,5 por ciento en un año y está ahora en 203.100 dólares.

Los pedidos de bienes duraderos a las fábricas de EEUU bajaron un 4,5 por ciento en agosto, como resultado de una menor demanda de una amplia gama de artículos. La caída de agosto fue la mayor desde enero.

En agosto, los despachos de bienes duraderos disminuyeron un 3,5 por ciento, la mayor caída desde abril de 2001. Los inventarios de bienes crecieron un 0,7 por ciento.

Por otra parte, las solicitudes de subsidio por desempleo alcanzaron la semana pasada el nivel más alto en siete años, en parte por los huracanes en Luisiana y Texas.

Las solicitudes nuevas del beneficio que pagan los gobiernos de los estados aumentaron en 32.000 y llegaron a 493.000.

El promedio de solicitudes en cuatro semanas subió en 16.000 y se ubicó en 462.500, la cifra más alta desde noviembre de 2001.