El ex jugador de cuadro del último equipo de Filadelfia en llegar a un
Serie Mundial, será homenajeado por los Phillies, el viernes, 12 de
septiembre, durante las festividades que marcarán el Día de la Familia
Latina en el estadio.

Duncan no podrá aceptar el galardón personalmente esa noche. Su trabajo
como coach de primera base de los Dodgers no le permite estar en
Filadelfia el día de la fiesta latina en el parque. Los esquivadores
juegan en Colorado esa noche y necesitan a su coach para seguir
avanzando en la carrera por el banderín de la División Oeste del Viejo
Circuito.

No obstante, el técnico dominicano se dirigirá al publico y aceptará el
honor por medio de un mensaje en video que él grabó el último fin de
semana de agosto cuando él y sus Dodgers visitaron a la Ciudad del Amor
Fraternal.

Al Día aprovechó esa visita y le preguntó a Duncan que significa para
él ser reconocido como una Leyenda Latina de los Phillies.

"Es un orgullo para mi como latino recibir ese premio. Le doy las
gracias al equipo de Filadelfia de haberme dado la oportunidad de poder
jugar aquí.  Una ciudad que por los tres años y medio (1992-1995) que
jugué aquí me trataron a mi y a mi familia como de primera clase.
Siempre que vengo a Filadelfia me emociono bastante por la forma en que
la fanaticada me recibe", declaró el nativo de San Pedro de Macorís.

"La única vez que yo pude participar en un Juego de Estrellas (1994)
fue cuando yo era miembro de los Phillies. Ese año yo jugué varias
posiciones, tercera, segunda, primera, y el outfield y los fanaticos me
escogieron con un gran cantidad de votos para ser el segunda base que
abrió el Juego de Estrellas".

Duncan disfrutó de muchos momentos gratos durante su carrera de 12
temporadas  como jugador en la Gran Carpa. El haber jugado en tres
Series Mundiales y ganar dos de ellos (1990 - Rojos y 1996 - Yankees)
ocupan un gran espacio en su memoria, pero él nunca olvidará su tiempo
en Filadelfia. "Lamentablemente perdimos la Serie Mundial en el 1993,
pero fue una año muy especial. El año anterior quedamos en último
lugar", manifestó Duncan. "Lo más especial para mi en el 1993 fue el
Día de las Madres, cuando yo conecté el jonrón con las bases llenas
para ayudar al equipo a venir de atrás para ganar un juego contra los
Cardenales". 

Los vínculos entre Duncan y el área de Filadelfia son estrechos ya que
dos de sus 10 hermanos (Enrique y Juan) viven en Camden, y dos primas
(Ana y Mariana), y una tía, (Estela) viven en King of Prussia.
Inclusive, la mamá de Duncan, Doña Nilda, viajó desde la Republica
Dominicana para ver a Mariano cuando los Dodgers pasaron por
Filadelfia. "Yo me voy pero ella se queda a visitar por unas semans
más", dijo Duncan sobre las vacaciones de su mamá.

Él no tiene planes de descansar una vez él complete su temporada con
los Dodgers. Duncan ya tiene planes para dirigir a los Azucareros del
Este en la liga invernal dominicana y ser parte del grupo técnico a
cargo de la selección que representará a su país en el Clásico Mundial
en la primavera.

En vez de dormirse en los laureles, Mariano Duncan continua trabajando fuerte. Eso es ser una verdadera Leyenda Latina.