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Un intento por detener la violencia en México antes de que se aprenda

Varias medidas propuestas muestran la preocupación, e incluso desesperación, que muchos políticos mexicanos sienten por el crimen en su país.

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Othon Cuevass Córdova, un legislador mexicano, presentó una propuesta para prohibir la fabricación, importación y venta de armas de juguete y otros relacionados con la guerra. 

Durante las vacaciones navideñas, amenazaron la vida de Othón Cuevas Córdova, un legislador mexicano, aunque fue jugando. Su pequeño sobrino le apuntó con una pistola de juguete que recibió como regalo y le dijo: "Tío, te voy a matar".

A Cuevas no le hizo gracia. Habló con los padres del niño sobre lo inadecuado de darle un arma, aunque fuera de plástico, en un país tan invadido por la violencia. Y agilizó la presentación de una prohibición legislativa a la fabricación, importación y venta de armas de juguete y otros relacionados con la guerra en la Cámara de Diputados de México.

"El niño es tan pequeño que apenas podía pronunciar las palabras", dijo Cuevas, quien es originario del estado sureño de Oaxaca en México, y representa al Partido de la Revolución Democrática, de centro izquierda. "Pero, desde la infancia, los niños están aprendiendo la cultura de la violencia, y necesitamos hacer algo al respecto".

La propuesta de Cuevas para prohibir el armamento de juguete, presentada recientemente, es una de diversas propuestas legislativas orientadas a enfrentar de una forma o de otra la explosión en los asesinatos y secuestros que México está experimentando, gran parte de ellos vinculados con la lucha entre narcotraficantes y autoridades por el control de las lucrativas rutas de transportación.

Los legisladores han sugerido legalizar la marihuana para reducir las ganancias de los narcotraficantes, volver a la pena de muerte para los secuestradores y reducir la edad de 18 a 12 años para que los sospechosos penales sean enjuiciados como adultos, entre otras medidas.

Las iniciativas de ley enfrentan posibilidades variadas de éxito y en algunos casos, expertos en seguridad las descartaron por irrelevantes.

Se considera que la propuesta para legalizar la marihuana no procede. Sin embargo, el presidente Felipe Calderón ha presentado su propia medida para permitir que quienes porten cantidades reducidas de drogas ilegales cumplan sentencias en centros de tratamiento en lugar de en la cárcel.

Expertos consideran que la reestructuración del sistema judicial de México -- la introducción de los juicios orales, más rápidos, en lugar de los actuales conducidos exclusivamente con el intercambio de documentos legales, y facilitar la detención de sospechosos de pertenecer al crimen organizado -- está entre los pasos legislativos más importantes que se han dado recientemente.

También se están considerando propuestas sustanciales para mejorar el intercambio de información entre las dependencias encargadas de la ley y el orden, así como la reestructuración de las fuerzas de seguridad para que sean menos corruptas.

Una de las prioridades del Gobierno de Calderón es reducir la cantidad de armas verdaderas en México, la gran mayoría de las cuales entra de contrabando a México desde Estados Unidos.

En el caso de la prohibición de las armas de juguete, Cuevas está buscando armar más a la que ya está en los libros. En 2002, México hizo que las armas de juguete que parecían de verdad fueran ilegales, en gran medida porque los delincuentes las usaban para cometer delitos y conseguir sentencias más leves. Esa prohibición se aplica a las réplicas de rifles de asalto, subametralladoras, rifles y pistolas.

Con la medida de reforzamiento presentada por Cuevas se multaría a quienes comercian con armamento de juguete o se cerrarían sus negocios. El país estaría mejor sin esas ventas, argumentó.

Cuevas reconoció que eliminar hasta la última pistola de plástico, un tanque con aspecto real o una réplica de un avión de guerra no va a hacer que México vuelva a ser seguro, un punto que también señalan los expertos en seguridad. "No es una panacea", dijo. "Son muchas las razones de esta violencia. Pero esto es algo que podemos hacer".

En otros lugares se ha intentado un enfoque similar. Los Ángeles, después de una explosión de violencia relacionada con las pandillas, prohibió la venta de armas de juguete en 1987. En Irak, el Ejército británico emitió un anuncio de seguridad pública el mes pasado en el que se solicita a los padres que no permitan que sus hijos jueguen con armas de juguete "en caso de que las fuerzas de seguridad las confundan con reales y abran fuego".

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