La Bolsa de Nueva York cerró hoy con un alza del 3,28 por ciento en el índice Dow Jones de Industriales en el día de las elecciones a la presidencia de Estados Unidos y pese a la subida del precio del petróleo.

El Dow Jones, el más importante indicador de Wall Street, subió 305,45 puntos (3,28%) y cerró en 9.625,28 unidades, después de que durante la sesión llegó a avanzar un 3,48 por ciento.

El mercado Nasdaq progresó 53,79 enteros (3,12%) y se situó en 1.780,12 puntos, mientras que el selectivo S&P 500 ganó 39,45 unidades (4,08%) hasta 1.005,75 puntos.

El índice compuesto NYSE, que agrupa a todos los valores cotizados en la Bolsa de Nueva York, subió 290,11 puntos (4,79%) y se situó en 6.345,09 unidades.

Wall Street cerró con sus principales indicadores en positivo a la espera de que los votantes decidan en las urnas quién será el próximo presidente de Estados Unidos: el demócrata Barack Obama o el republicano John McCain.

Los analistas aseguran que, independientemente de quién gane los comicios, los inversores confían en que un cambio en la Casa Blanca traiga estabilidad a los mercados.

Wall Street también aplaudió la noticia de que el Gobierno estadounidense sopesa comprar acciones en más firmas financieras, tal y como ha hecho en los bancos, según el diario The Wall Street Journal.

Las acciones de General Electric, que forma parte del Dow Jones de Industriales, subieron un 7,62 por ciento hasta los 20,77 dólares, mientras que las del Grupo CIT avanzaron un 36,06 por ciento hasta los 6,15 dólares, después de que este diario financiero los citara como posibles receptores de esta inyección de capital.

Las acciones de MasterCard, la segunda mayor compañía de tarjetas de crédito del mundo, subieron un 18,31 por ciento hasta los 170,24 dólares, a pesar de que perdió 493,3 millones de dólares entre enero y septiembre de 2008, comparado con una ganancia de 781,6 millones de dólares en los nueve primeros meses de 2007.

La decisión del Banco Central de Australia de recortar en tres cuartos de punto los tipos de interés, hasta el 5,25 por ciento, inyectó optimismo a Wall Street, que confía en que el Banco Central Europeo (BCE) y el Banco Central Británico sigan esta semana sus pasos y que esto ayude a estabilizar la economía europea.

La publicación de datos económicos negativos y la fuerte subida del precio del petróleo no aguaron la fiesta a Wall Street.

El Departamento de Comercio informó de que los pedidos de bienes a las fábricas de Estados Unidos disminuyeron un 2,5 por ciento en septiembre después de una reducción del 4,3 por ciento el mes anterior.

El dato es peor de lo esperado por los analistas, que habían calculado una caída de alrededor del 0,2 por ciento en los encargos a las fábricas.

En la Bolsa Mercantil de Nueva York (Nymex), el barril de petróleo de Texas se encareció 6,62 dólares (10,4%) y terminó la sesión a 70,53 dólares, mientras que el oro subió 30,50 dólares (4%), hasta los 757,30 dólares, impulsado por la depreciación del dólar frente a otras divisas.

Las obligaciones a diez años subieron en el mercado secundario de deuda y su rentabilidad, que se mueve en sentido inverso, se situaba en el 3,73%, frente al 3,92% del cierre del lunes.