Si los Phillies llegan a los 'playoffs' o no esta temporada dependerá de como ellos jueguen el resto del año.

No digo eso porque quiero ser simplón.

Es que esta temporada ellos no recibirán ayuda de los Mets o los Marlins para ganar la División.

El año pasado, el colapso de los Mets tuvo mucho que ver con la captura del banderín por parte de los Phillies. Si los Mets hubiesen perdido dos juegos menos de los 13 que perdieron en sus últimos 20 desafíos de la temporada, Nueva York en vez de Filadelfia hubiera terminado primero.

Filadelfia tiene el mejor equipo de la División. Los Mets tienen problemas con su bullpen. Los Marlins son un equipo joven.

Sin embargo los Phillies tienen que dejar de titubear el resto del año si ellos quieren llegar a los 'playoffs'. En los dos meses que le restan a la temporada, Filadelfia tiene que jugar con la furia que demostró el pasado fin de semana contra Atlanta.

Filadelfia le dio unas pelas tan serias a los Bravos que los eliminó de contención con 58 juegos restándole a la tribu.

Atlanta anotó 27 carreras en tres juegos pero sólo salio con una victoria en la serie de tres desafíos.

El viernes, los Bravos ganaron el partido 8 a 2.

El sábado, todo indicaba que Atlanta iba en camino a su segundo triunfo en hilo contra Filadelfia y que por fin sería el contendor por el banderín que muchos expertos esperaban. Los Bravos comenzaron la cuarta entrada con ventaja de 9 a 3. Sin embargo, Filadelfia no se rindió. Con la ayuda de un cuadrangular de tres carreras del peruano Gregg Dobbs, los Phillies anotaron siete carreras en el quinto episodio y terminaron ganando el juego 10 a 9.

El domingo, Filadelfia completó la masacre al vencer a los Bravos de nuevo de forma espectacular. Atlanta tomó ventaja de 5 a 0 en la parte alta del cuarto inning. En la parte baja del mismo episodio, Filadelfia empató el juego y más tarde anotó siete carreras más para poner el juego 12 a 5. El partido terminó con una victoria de los Phillies por marcador de 12 a 10 luego de que Atlanta intentara un contraataque.

Las dos derrotas por si solas fueron desmoralizadoras para los Bravos pero lo que más los chocó fue la ferocidad de los Phillies. Una manifestación de ese fervor fue la colisión en el plato entre Shane Victorino y el receptor de los Bravos, Brian McCann. En el sexto inning, Victorino tiró su cuerpo tan violentamente contra el de McCann que el receptor perdió el conocimiento, sufrió una concusión cerebral, y no pudo jugar los próximos tres juegos de los Bravos contra San Luis.

Los Phillies desanimaron a Atlanta de tal manera que días después de la serie los Bravos mismos se hicieron el haraquiri para preservar su honor. Ellos izaron la bandera blanca de rendición  cuando canjearon a Mark Teixeira, uno de sus mejores bateadores, a los Angelinos.

No será tan fácil eliminar a los Mets y a los Marlins.

Ellos no sufrieron la ráfaga de lesiones que debilitó a los Bravos. Los Mets están animados y mejor manejados bajo su nuevo piloto Jerry Manuel. Los Marlins están jugando con la actitud que no tienen nada que perder por ser precoces.

Filadelfia tiene que continuar jugando con bravura o serán ellos los que terminarán noqueados.