Hispanos tienen el peor servicio de salud que los blancos no hispanos, según el reporte "Disparidades nacionales en salud" para el 2007.

Más de la mitad de las disparidades evaluadas en la comunidad latina no están mejorando:  El acceso que los latinos tienen al sistema de salud es el peor de todos con el 80% que sigue igual de mal o peor que el año pasado.

Las inequidades estudiadas resaltan que para los adultos es más difícil conseguir atención médica inmediata y oportuna para una enfermedad o herida.

Las mayores disparidades se presentan en las siguientes áreas: Nuevos casos de sida, cuidado prenatal, admisión hospitalaria para amputaciones de extremidades inferiores a causa de diabetes, y la habilidad misma de los latinos para poder comunicarse.

Estas son tan sólo algunas de las áreas que destaca el reporte que demuestra la gran desventaja para los latinos respecto de personas de raza blanca no hispanas en acceder a cuidados de salud apropiada y oportunamente.

Si usted es pobre este asunto se complica.  Los adultos pobres tienen menos de la mitad de las probabilidades de ser atendidos oportunamente en comparación con los adultos de más altos ingresos.  A los niños les va peor todavía, dada la proporción de padres que tienen dificultad en comunicarse con los médicos y enfermeras, estos niños tienen tres veces menos oportunidades respecto de niños de familias de altos ingresos.

La mayor barrera de todas en acceder a la atención médica es no estar asegurado.  Dada la naturaleza del sistema de salud en Estados Unidos, un seguro de salud es una necesidad básica.

El 29 por ciento de los hispanos en el 2007 no contaban con seguro médico, comparado con el 14 por ciento de no-hispanos de raza blanca, el 15 por ciento de no-hispanos afro-americanos y el 12 por ciento de asiáticos.

Un ejemplo del estándar diferente en la atención médica si usted está asegurado es evidente en el tratamiento estándar de diabetes.

El reporte destaca que el número de individuos latinos que recibieron los tres servicios recomendados para tratamiento de diabetes varían significativamente según se tenga seguro médico o no.

De aquellos que recibían un seguro público solamente el 28,2 por ciento recibía los tres servicios, mientras que de aquellos sin seguro, solamente el 23,2 por ciento se beneficiaba del tratamiento completo. Entre tanto, los pacientes con seguro médico privado obtenían el 48 por ciento del total de los tres servicios recomendados, lo cual, además, demuestra que tener seguro médico no es garantía de que recibirá toda la atención médica que realmente necesita.

Por otro lado, esto demuestra la importancia de ser un consumidor informado.

INFÓRMESE, NO SE CONFUNDA

Informarse es una de las recomendaciones del reporte de la "Latino Coalitions" intitulado "Mejorando la atención médica de latinos en Estados Unidos–2006", el cual enfatiza el importante rol de los medios de comunicación latinos en reportar hechos y cifras en materia de salud para animar a la población a buscar información y aprender a utilizar los servicios médicos disponibles.

Más de la mitad de todos los estadounidenses tienen dificultad de entender y actuar basados en la información sobre la salud, por lo que resulta un reto para todos y no solamente los hispanos según el estudio "Educación en Salud: Una receta para ponerle fin a la confusión".

Mejorar su conocimiento en materia de atención médica, aprender a navegar el sistema de salud, entender las instrucciones relacionadas con exámenes, tratamientos y medicaciones, mejorará sus oportunidades de recibir mejor atención.

El mismo reporte destaca que a mayor capacidad de comunicarse con su médico, mejorará su habilidad de plantear preguntas, de informarse bien y seguir correctamente las recomendaciones del tratamiento.  Estos pacientes tienen mayores niveles de satisfacción cuando la comunicación es suficiente.  Aún si necesita traer consigo a un traductor, este puede ser un buen recurso para asegurarse de recibir el mejor tratamiento.

Nunca hay que olvidar, sin embargo, el beneficio a nuestra salud que resulta de cambiar nuestros hábitos y estilo de vida.

RECURSOS PARA NO ASEGURADOS

Programas con fondos federales tales como el S-CHIP ofrecen cobertura para los niños y adolescentes.  
Su centro comunitario latino local es siempre una buena fuente de información para encontrar clínicas y programas locales disponibles en su zona.

Los departamentos estatales de salud ofrecen también una variedad de recursos.

En Pensilvania el departamento de seguro médico provee el programa de seguros Adult Basic para personas de bajos ingresos y los no asegurados, la dirección internet es www.ins.state.pa.us/ins y busque el vínculo (link) al programa Adult Basic en español.

En Nueva Jersey el departamento de salud provee seguro para personas de bajos ingresos y los no asegurados.  El sitio web es www.njfamilycare.org (disponible en español) o llame al 1 800 701 0710.

En Delaware visite www.delawareuninsured.org (solamente en inglés), perteneciente al Departamento de Servicios de Salud y Sociales de Delaware, que cuenta con un programa para los no asegurados y lista todos los recursos disponibles.

El hecho es que existen recursos.  Para hallarlos es necesario hacer un poco de investigación.

Si tiene dificultad en comunicarse busque a alguien que lo pueda ayudar. Vale la pena hacer el esfuerzo para conseguir la ayuda que realmente necesita.

No olvide que aún si usted cuenta con un seguro médico, asegúrese de que le brinden la mejor atención médica posible.

Haga preguntas si no entiende algún aspecto del cuidado médico. Mientras más informado esté mejores serán las probabilidades de recibir mejor atención médica.