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Floyd no hace lucir mal a Filadelfia

El éxito de Gavin Floyd no significa que los Phillies fallaron en su evaluación del talento del pitcher que en las últimas 4 semanas arrojó casi dos no-hitters…

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El éxito de Gavin Floyd no significa que los Phillies fallaron en su evaluación del talento del pitcher que en las últimas 4 semanas arrojó casi dos no-hitters.

El martes, Floyd lanzó 8.1 entradas sin permitir imparable contra los Mellizos antes de que Joe Mauer le pegara un doblete. Veinticuatro días antes, Floyd tenía un no-hitter después de 7.1 episodios contra los Tigres, pero Édgar Rentería rompió el hielo con un sencillo.

En su primeras seis salidas esta temporada, Floyd tenía récord de 3-1, 2.50, y 19Ks en 39.2 entradas para los Medias Blancas.

El 2008 es la segunda temporada de Floyd con la organización de Chicago. En diciembre del 2006, Filadelfia canjeó a Floyd y a Gio González (un lanzador de liga menor) por Freddie García.

García no pitcheó mucho con los Phillies (1-5, 5.90 en 11 aperturas) antes de someterse a una cirugía en su hombro derecho. Los Phillies sabían que García estaba lastimado, pero esperaban que su brazo estuviera lo suficientemente fuerte para un año más de trabajo. Para Filadelfia, el precio parecía razonable: dos pitchers jóvenes que no prometían mucho por un abridor establecido, aunque un poco adolorido.

González, de 23 años de edad, aún no ha debutado en la Gran Carpa. El nativo de Hialeah, Florida, tenía marca de 0-2, 5.00, en sus primeras 6 aperturas este año en la sucursal de Triple A de los Medias Blancas.  González ha gozado de éxito en las ligas menores (24-19, 3.61) en cinco temporadas pero él ahora se encuentra con Oakland, su tercera organización como profesional.

La carrera de Floyd como pelotero profesional comenzó a la edad de 18 años cuando los Phillies lo escogieron en la primera ronda del sorteo de novatos del 2001 (la cuarta selección de la rifa). Los Phillies subieron a Floyd a las Mayores en septiembre del 2004. Él disfrutó de una marca de 2-0, 3.49, en su primer mes en las Grandes Ligas.

Durante las próximas tres temporadas, sin embargo, Floyd tuvo dificultades. Sus lanzamientos rompientes eran devastadores y su recta era fuerte, pero sus presentaciones al plato no eran consistentes. Él telegrafiaba sus pitcheos. Sus lanzamientos rompedores salían de su 'windup' de un sitio diferente que sus rectas. Tan obvia era la falla, que hasta yo veía lo que venía. Me acuerdo ver a Floyd pitchear en un juego de Triple A durante una de sus bajadas a las menores. Tuve la suerte de sentarme en las gradas detrás del plato y sin falla descifré cada uno de sus lanzamientos antes de que llegaran al plato.

Los Phillies hicieron todo lo posible para ayudar a Floyd a ser consistente en sus presentaciones. Pero entre más se hacía para enderezarlo, más aturdido se le veía. Él perdió su confianza y un monticulista sin confianza es una víctima fácil para los bateadores. Es un testamento de las habilidades de Floyd que, no obstante todas sus dificultades, logró una marca de 5-5 en 18 salidas para los Phillies entre el 2005 y el 2006.

Hoy, Floyd recobró su confianza y simplificó sus presentaciones. "Yo hice las cosas complicadas (en Filadelfia)", le dijo Floyd al Seattle Times. "Ahora trato de hacerlas con simplicidad...Tengo mucha confianza ahora...tres años atrás yo tenía mi rabo entre mis piernas".

El cambio de ambiente y la madurez ayudaron a Floyd a arreglar sus fallas.

No sería justo acusar a los Phillies de ser impacientes con él.

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