El Gobierno mexicano asumió el control sobre la policía local de 13 municipalidades, que se sospecha, tienen vínculos con el crimen organizado y podrían estar ligados al caso de los 43 estudiantes desaparecidos.

De acuerdo con FoxNewsLatino, los jefes de la policía serán trasladados a las sexta región de Tlaxcala para practicarles exámenes de control de confianza" y analizar su posible responsabilidad en el caso.

Las municipalidades se encuentra a unos 200 kilómetros de Iguala, ciudad en la que desaparecieron 43 estudiantes luego de una violenta confrontación con la policía local.

El Comisionado Nacional de Seguridad, Monte Alejandro Rubido, informó de que "se han identificado situaciones irregulares en algunas corporaciones de seguridad municipal".

Por esta razón, "el Gobierno de la República asumirá las tareas de seguridad pública" en los municipios de Apaxtla de Castrejón, Arcelia, Buenavista de Cuéllar, Coyuca de Catalán, General Canuto A. Neri, Ixcateopan de Cuauhtémoc, Pilcaya, Pungarabato, San Miguel Totolapan, Taxco de Alarcón, Teloloapan y Tlapehuala, en Guerrero; y en el de Ixtapan de la Sal, en el Estado de México.

Autoridades desarmaron al cuerpo policial de esta zona y hasta ahora han arrestado a 36 miembros de la policía. Tanto el alcalde como el jefe de policía de Iguala se encuentran fugitivos y están acusados de mantener vínculos con el cartel local "Guerreros Unidos".

Rubido dijo que la búsqueda de los estudiantes se está realizando por cielo mar y tierra en colaboración con los familiares y la Cruz Roja Internacional.