Un año después del colapso de la mina San Esteban, en la ciudad de Copiapo, Chile, la fama llegó pero la fortuna esquiva a los 33 mineros chilenos rescatados.

Y es que mucha gente pensó que los mineros encontrarían fama y fortuna luego de su espectacular rescate después tras 69 días dentro de una mina de cobre se apoderó de todo el mundo el pasado 13 de octubre de 2010.

Sin embargo, no ha sido así.

Casi la mitad de los hombres se encuentran desempleados desde que su mina se derrumbó el 5 de agosto del 2010.

La mayoría de los trabajadores se han inscrito para dar platicas de motivación y hasta hoy, cuatro han vuelto ya a picar roca en los subterráneos para ganarse la vida.

"Los 33" han presentado demandas por negligencia exigiendo $10 millones por parte del propietario de la mina y $17 millones al gobierno por no hacer cumplir las normas de seguridad.

A pesar de los rumores de que los mineros se enriquecieron a través de entrevistas con los medios, la mayoría solo recibieron viajes, estadías en hoteles y el tipo de regalos que no ponen comida en la mesa.

Así reportó Fox News